Te eché de menos

865 67 1
                                    

           El sonido de mi celular hace que me despierta sobresaltada porque ya es tarde. Es un mensaje de un numero desconocido.

"Abrene la puerya. Por favpr" J. -Lo leo con el seño fruncido, tratando de interpretar qué es lo que dice, y luego se me detiene la respiración.

¡¿Qué?! ¿J? ¿J de Jamie? ¿Mi Jamie? ¿Como consiguió mi numero? No puede ser. Y si es él, no creo que este en sus cinco sentido, por como escribió el mensaje.

Me coloco rapidamente mi pijama y corro a abrir la puerta. Cuando abro la puerta y salgo, mi corazón comienza a latir tan rapidamente, que temo que me de algo.

Sí, es Jamie, mi Jamie... ¿Estoy soñando?. Y, efectivamente, no esta en sus cinco sentidos. Él esta sentado a un lado de mi puerta, mirando hacia el piso con una botella de guinness en su mano.

-Hey...- Es todo lo que logro articular.

Jamie inmediatamente voltea hacia el sonido de mi voz, y sonrie ampliamente cuando me ve.

-Hey, pense que ya no vivias aqui.-Dice arrastrando las palabras, lo cual me dificulta un poco entenderlo.

Intenta pararse, pero esta tan borracho que vuelve a caer de culo. A pesar de mi estado de shock, me río y voy hacia donde ésta para ayudarlo.
Extiendo mi mano, él la ve sonriente y luego la toma para levantarse. Le paso un brazo alrededor de su espalda y él envuelve el suyo en mi cintura. Un escalofrio me recorre la espalda cuando siento el tacto de sus frios dedos contra mi piel.

-Nena, no puedo creer que al fin te vuelvo a ver. Te eché tanto de menos. -Dice mientras entramos a mi departamento. Mis ojos se cristalizan.

-Shh. Cas... -Me aclaro la garganta.- Casi ni logro entenderte porque estas muy borracho, James.

-James, ¿eh? Así solias llamarme cuando estabas molesta. -Suelta una carcajada, pero de repente se calla y niega con la cabeza. -Espera, ¿Estas molesta? ¿Te molesta que haya venido así, sin avisar? -Sí, me molesta, porque ya me habia hecho a la idea que nunca vendrias.
Quiero decirle eso, pero sé que empezaria a llorar y no quiero hacerlo.

-En lo absoluto. Solo que esperaba que si alguna vez venias, estarias sobrio, no en este estado. -Incluso para mi propia sorpresa, mi voz sale fuerte.

Mientras le digo eso,  lo estoy ayudando a recostarse, pero él se niega a soltarme, asi que caemos uno encima del otro en el sofá. No, tampoco estaba preparada para sentir su respiración en mi rostro, ni el latir de su corazón tan fuerte como el mio. Nos quedamos viendo fijamente por lo que parece una eternidad, hasta que, por suerte para mi y lo que me queda de cordura, comenzamos a reirnos.

-Oh, perdoname. Esa era mi intención, pero Eddie y Garf me secuestraron hasta ponernos al dia.

-Ya veo. -Me levanto y acomodo una tira de mi blusa que está mas abajo de mi hombro. La mirada de Jamie vuela a ese lugar.

-Tan hermosa y perfecta como recordaba. -Sonrie de costado.

-Y tú tan borracho como lo recordaba.

-Uh. Eso fue un golpe bajo. -Ruedo mis ojos.

-Si quieres puedes bañarte, mientras yo caliento algo de cafe y comida, a ver si se te pasa un poco la borrachera, mira que estoy haciendo uso de toda mi capacidad para entenderte.
Él bufa y pone los ojos en blanco. Pero se levanta tambaleante y me pide una toalla. Le digo que en el baño hay y él asiente.

Cuando entra al baño, yo voy a la cocina.

¡Dios! Me está temblando todo. Aun ni se como he podido articular las palabras. Sigo sin creer que luego de varios años, Jamie este aqui nuevamente.

One shots | DamieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora