8- ¿Qué?

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***
Me levanté de la cama y todo mi cuarto era un desastre, podía ver cajas de cigarrillos tirados por todos lados. Después de cambiarme y alistarme bajé a la cocina, al parecer no estaba mi madre. En el comedor había un plato con hot cakes con huevo, tocino y jugo de naranja. Aún lado había una caja blanca con una nota, la tomé y la leí:

"Feliz cumpleaños Alisson, perdón por no poder estar este día contigo pero tengo que trabajar y volveré hasta ya muy tarde. Espero que te guste este pequeño detalle. Te quiero mucho mi Lizzy, felices 16.

-Vuelve a ser mi pequeña de antes, tu mamá. "

Abrí la caja y mire un grande y lujoso collar color rosa pálido, era muy bonito...
***

Abrí los ojos y observe las paredes de mi departamento, me senté lentamente y vi hacia todos lados, de nuevo, como ya es costumbre, un recuerdo en mis sueños. El sol estaba fuerte y lo primero que hice fue tomar mi celular y me di cuenta de que era muy tarde y de que tenía mensajes.

De: Marcos

Buenos días cariño. Ya se que conociste a James.

Después de leer el mensaje de Marcos no tenía ganas de nada, el solo hecho de pensar de que cada cosa que yo hacía el la tenía vigilada me deprimía.
Bajé por las escaleras y fui directo a la cocina, como no había nada más me serví un poco de cereal con leche.

Me dolía la cabeza y no sabía que hacer así que tome mi MacBook y busque en internet "parques en Nueva York" por suerte encontré uno no muy lejos del edificio, a unas cuantas cuadras al norte. Terminé de desayunar y me aliste con ropa deportiva coloque mis auriculares en mis oídos y me fui caminando hasta llegar al parque. Comencé a trotar alrededor del parque al igual que algunas personas, mientras pensaba en muchas, muchas cosas. Estoy atrapada en mi vida, no puedo hacer nada que Marcos no acepte por que sí lo quiero hacer el me amenaza con matar a la única persona que quiero, a mi madre, ¿algún día saldré de esto? Antes pensaba que encontrar a un chico que me amara me haría un poco mas feliz, pero luego pensé en que eso solo ocasionaría más problemas, ¿Algún día un hombre se enamorara de mi como en los libros y en las películas? Veo eso como algo tan lejano, tengo una terrible forma de ser, de hecho, ni siquiera yo misma tengo claro la manera en la que soy y lo admito, me desespero muy rápido, ¿por qué alguien se enamoraría de mi? ¿James se enamoraría de mi o de una persona que simulo ser? La noche anterior que conviví con él, la mayoría de las veces una parte de mi estaba contenta, aunque yo misma lo niegue, es como sí mi interior estuviera dividida en dos partes.

Estuve así casi una hora trotando hasta que me cansé y regresé  caminando al departamento, cuando iba llegando a las afueras del grande edifico, vi a James que salía de su auto para después darle las llaves a el guardia, trate de que no se diera cuenta de mi presencia, pues él venía de trabajar, con camisa blanca y pantalón de vestir y yo estaba toda sudada, despeinada y horrible.

-Elizabeth, ¡hola!que bueno que te veo, te necesito.- Se acercó a mi.

-Hola-. Sonreí ligeramente. -Qué pasa?- Dije mientras entraba al edifico y el me seguía. Diablos.

-Mmmh, no estoy muy seguro.- Sonrió, siempre al hacerlo se veía tan relajado. -Pero, creo que te quedaste con mi saco negro ¿o no?

-Oh sí, lo olvidaba, de hecho te lo iba a llevar.

-Disculpa que te lo pida así, es que lo necesito urgentemente para mañana.

-Esta bien..- No supe que más decir y sin que le preguntará el me contestó.

-Es que iré a un baile e irá mi familia y...- Su voz fue bajando y se quedo pensando. Susurro algo bajó y no lo pude escuchar.

-¿Dijiste algo?

-Nada, es una idea tonta.

-Anda, dime.

-No- Rió.

-No me digas pues-. Bajé la mirada y sonreí y sentí que el sonrió también.

-Bueno, es que, pensé en que, mmmh, tal vez tu fueras al baile conmigo.- Me quedé callada, de nuevo no sabía que decir. Este chico era un tanto extraño. -Es que justo acabo de recordar que tengo que llevar pareja y lo había olvidado por completo y..-Me observó y bajo rápido su mirada. -Pero si no quieres ir, obvio no vayas, tal vez pienses que soy un loco.- Volvió a reír.

-No, no, es que, sólo me tomaste de sorpresa.- Un silencio incómodo comenzó entre nosotros y esta vez decidí romperlo yo. -¿Un baile dices?- Dije. Creo que este chico no tiene pretendientes o amigas a quien invitar. >O tal vez si pero el quiere invitarte a ti< rápido callé esa voz de mi mente.

-Sí, es que mi tía es dueña de una fundación de niños con cáncer, y pues organizó un baile para recaudar fondos.- Me quede pensando, mientras más rápido termine este plan de Marcos mejor.

-Entonces, si es para los niños, está bien, acepto ir.- Pasé mi mano por mi coleta.

-¿En serio?- Al parecer se sorprendió por mi repentina respuesta.

-Claro, me gusta ayudar a los niños.- En verdad si me gustaba, aunque odiara a las mayoría de las personas, mi relación con los niños y a los animales era un tanto diferente.

-Te comprare el boleto, entonces.

-De acuerdo, y ¿a qué hora será?

-Empezará a las ocho de la noche.

-Y.. ¿Supongo que será muy formal verdad? - Fruncí la nariz. -¿Con vestido de cóctel y eso?

-Supongo.. si quieres te lo puedo comprar.-

-Por favor, James, no exageres.- Dije, presumido.

-¿Qué? Lo digo en serio, aún te debo mucho, y aparté, estoy muy agradecido de que me acompañes.

-No hay de que.- Fingí una sonrisa.

-¿Quieres qué pase por ti?

-Mmmh, creo que es mejor que tome un taxi, y te veo allá.

-¿Segura? Ah, casi lo olvido tienes que ir con antifaz.

-¿Antifaz? -Fruncí el ceño. -¿Entonces no te reconoceré?

-Nos encontraremos, lo sé. Pero por sí pasa algo, ¿cuál es tu número? - Dijo sacando su celular. Yo tomé el mío que estaba en mis manos y busque mi número, se lo pasé y el guardo el suyo en mi celular. Con un >>James :)<< -Estaremos en contacto.- Dijo.

-Entonces, si quieres acompáñame a mi departamento para darte tu saco...- Dije.

-De acuerdo.-Dijo mientras caminábamos en dirección a el elevador, nos habíamos quedado en medio de la recepción conversando. Hablábamos ya como si fuéramos amigos, eso era bueno, supongo.

Atrapados.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora