Josh y Tyler se mudan a Kentucky, donde confesaran sus sentimientos y disfrutarán del puro salseo.
Zorras, acosadores, amistad, amores y desamores. Y obviamente, mucho Joshler.
---Portada por @eme4khd
Narra Adri Yo estaba sentado al lado de Mark, quien obviamente conducía mientras tomaba su lata de red bull, ya eran las 8 de la noche y aún ni siquiera habíamos salido del estado. Debiamos ir así:
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Ya que no vivíamos en la capital de Kentucky, si no en una ciudad bastante alejada. -¡Tengo que hacer pis!- dijo Tyler como si fuera un niño de 6 años. -No me jodas Tyler, venga ya ¿no podrías haberlo hecho antes en la gasolinera?- protestó Mark, a quien entendiblemente no le daban muchas ganas de parar. -No hables asi a mi novio Mark- dijo Josh fingiendo un enfado. -Ya se lo que haremos, cuando lleguemos a la siguiente ciudad, pararemos completamente, también para dormir ¿las tiendas de campaña estan en el maletero verdad?- dijo Mark. -Si Markie, pero creo que va a llover- dijo Aime mirando su IPhone. -Es igual, dormiremos en el coche- Tyler hacia soniditos dando a entender que se meaba, lo cual era gracioso por que parecía que tenía 10 años menos. Era adorable, como si fuera un niño pequeño y todos tuviéramos que cuidarlo. Al fin llegamos a la siguiente ciudad, que ya era la capital de Kentucky, y Tyler salió a mear a una gasolinera.
Narra Josh Mi pequeño bebé se hacia pis, así que le acompañe al baño de la gasolinera, y como había que comprar algo para poder utilizar el servicio, compré unos haribos. Tyler salió del baño. -Oye Tyler ¿Tienes en cuenta lo lindo que eres, verdad?- le dije. -Si, por supuesto que lo tengo en cuenta.- -Eso me recuerda a la primera vez que te llamé bebé ¿Recuerdas?- dije con cara nostálgica. -Si, fue al poco tiempo de conocer a los chicos, fue tan bonito... nos besamos bajo la luz de la luna, ¿Recuerdas? Fue uno de los mejores días de mi vida.- -Tyler, no sabes la felicidad que siento en este momento- le dije. -Me haces el chico mas feliz del mundo ¿sabes?- Tyler rió adorablemente. Ya no nos solíamos sonrojar tanto, habíamos hecho todo lo que hacen las parejas por lo tanto, ya no había verguenza. -Oye amor, ¿Quieres que esta vez en vez de besarnos bajo la luz de la luna lo hagamos bajo la lluvia?- dije señalando a la ventana de la gasolinera, en la cual había gotitas. -Me parece genial bebé, pero me parece que necesitamos algo mas original...- entonces cogió los haribos. -Nos comeremos uno entre los dos- entrelazó su mano con la mia, y salimos. Colocó un haribo, no en mis dientes, sino en mis labios. El colocó los suyos en el otro extremo, y fuimos tomando el haribo poco a poco, hasta que nos lo tragamos para comenzar a besarnos. Era el típico beso bajo la lluvia, pero no uno deprimente, sino uno dulce, y no sólo por el sabor del haribo, sino también por la persona que estaba en frente mía.
Mientras tanto, en el coche
Narra Eyva -Uf, ¿entra frío verdad?- dije yo. -Hay chaquetas, el problema es que están en el maletero - dijo Mark. -Yo iré dijo Connor-, y volvió mojado con dos chaquetas y una manta. -Amor, ¿por qué no me has traído a mi?- dijo Mark con tono afeminado, para bromear. -Um, creo que mejor olvidaré eso- dijo Connor con su hermosa sonrisa. Me puse la chaqueta, y Connor me puso una manta por encima. -No hace tanto frío, ya que estamos en verano, así que en vez de un café te daré esto- dijo dándome un ColaCao Shake. Bebí un trago y Connor me limpió los restos con su pulgar, pasandolo asi por mis labios. Entonces, se acurruco junto a mi debajo de la manta. -No podría estar mejor que aquí, a tu lado bajo la lluvia- se acurruco mas hacia mi y pasó su brazo por encima de mi. -Olvide que esta ciudad está casi en el campo, mira- dijo señalando el precioso cielo estrellado. Y así nos quedamos dormidos.
Narra Ai -¡Idiota, así no se monta una tienda de campaña!- le grité a Mark, golpeandole. -No sé como voy a casarme contigo si ni siquiera sabes hacer esto.- dije, y puse la tienda en prácticamente segundos. Ya había dejado de llover, pero Eyva y Connor ya estaban en el coche asi que decidimos no despertarlos y montar las tiendas fuera. Estabamos en una carretera desértica, con una gasolinera cerca por si necesitábamos algo. -Yo que tu no me casaría con el- bromeó Say -Me averguenza hasta tenerlo como cuñado...- Mark me miró haciendo un puchero. -¿No vas a defenderme?- dijo ofendido. -Nop, te lo mereces-