Prefacio

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Sí, esta historia ya la había publicado antes, pero no me convenció y la bajé para editarla y publicarla de nuevo.
Así que haz como que no la has leído y si no lo has hecho, espero que te guste.
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ーNo camines debajo de escaleras ー murmura Izuku al ver a una persona que iba caminando y sin darse cuenta pasa debajo de una escalera, donde más adelante se tropieza y cae ー Te lo dije ー murmura

Sigue caminando, sus pasos son pesados y va sin absolutamente nada de ganas.

El día brillaba y las personas alrededor hacían su vida con completa alegría, adornando sus rostros con una sonrisa

A excepción de él.

Más adelante, ve a dos hombres cargando uno de esos espejos enormes y de la nada aparece una chica cargando una cantidad descomunal de libros, iba con prisa, casi corriendo. Sus pies se enrededan unos pasos más adelante, tropesándose unos centímetros antes de donde estaba el espejo, provocando que todos los libros caigan sobre este, quebrándolo al instante

ー No rompas espejos ー murmura una vez más mientras suelta un suspiro

Sigue caminando de esta forma, hasta que llega a un cruce y se detiene justo a la hora en que un gato negro se atraviesa en su camino, moviendo su cola bastante feliz

ー Ahg... no puede serー se da un golpe en la cabeza y espera a que pase lo que sea que tenga que pasar

Pasan los minutos y nada, lo que le extraña, pues normalmente ocurren al instante

ー ¿Será que... ー se emociona por un momento, creyendo que toda esa racha de mala suerte por fin lo había abandonado.

Entusiasmado por comprobarlo, decide cruzar la calle luego de comprobar que no venía ningún carro.

Da un paso y nada. Da otro y nada.

Así hasta que llega a la mitad de la calle

ー Supongo que está bien...

Pero pensó demasiado rápido, el tiempo del cruce de peatones había pasado y el semáforo de nuevo estaba en verde.
Entró en desesperación al notarlo, tratando de apresurarse a llegar al otro lado, hasta que siente un enorme auto detrás de él

ー No debí salir de casa hoy ー se mentaliza.

...

Cualquier persona diría que todos los eventos de mala suerte o buena suerte son casualidad.

Que algo como eso no existe, ya que queda en manos de la probabilidad

¿Qué tan probable es que te caiga un rayo?

Según Google, la probabilidad es de una de cada tres millones.

Pero a él ya le pasó.

¿Qué tan seguido puedes sufrir un accidente de auto?

Izuku ha pasado por diez accidentes de auto.

Nunca se ha atrevido a manejar uno, ya que considerando su suerte, podría atropellar a un sin número de personas y prefiere no arriesgarse.

O puede que al instante que se suba, explote sin más.

Este tipo de cosas son el día a día del pecoso desde que tiene memoria.

Tuvo que volverse independiente a corta edad, sin dinero y con mucha dificultad para conseguir un trabajo.

Vive en un edificio bastante viejo, ya que no le alcanza para una zona decente.

Lo han echado, botado, golpeado, asaltado, burlado y amenazado.

Sus intentos de suicidios equivalen al número de veces que ha pasado por un desafortunado evento.

Pero incluso estos le salen mal.

Al parecer su mala suerte quiere seguir atormentándolo un tiempo más.

Pero no sabe qué hacer, todo se pone en su contra y está a punto de darse por vencido con su única solución.

La última carta de esperanza: Encontrar a su amuleto de la suerte.

Aquel del que le habló su madre antes de morir, el que sería capaz de romper aquella racha de desafortunados sucesos.

Aquella maldición.

Lucky | BNHA | Katsudeku Donde viven las historias. Descúbrelo ahora