En el centro de la mesa había una tarta.
Yo no sabía que estábamos celebrando.
Típico de mi, siempre despistada.
Tú estabas ahí, con tu madre.
Tu madre era castaña, alta y llevaba un jersey azul
Tú te estabas despidiendo de todos.
Y yo no lo entendía.
Cuando saliste por la puerta, me dí cuenta.
Te ibas.
Te ibas a un lugar lejos de aquí.
Por lo que me contaron hace unos meses, nunca volviste.
Y yo nunca pude decírtelo.
A.
