Capítulo Ocho.

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''¿Mejor?''.

Preguntó Noah luego de un rato y asentí.

''Si, perdón por recibirte así''.

Dejo un beso en mi frente.

''No, amor. No debes disculparte''.

''Es que, este tema debe tenerte loco''.

Se encogió de hombros.

''¿Sabes que me hubiera enloquecido? Que estoy hubiera pasado y yo no estuviera''.

Reí y le di un beso.

''Yo también hubiera enloquecido sin ti''.

Me acomodé poniendo una pierna a cada lado y empiece a desabrochar los botones de su camisa.

Toque sus clavículas recorriendo con los dedos, me encantaba eso de Noah.

Él me aguanto por la cintura y fui hacía su cuello.

Dejando un pequeño camino de besos hasta su mandíbula cuando volvió a besarme.

Yo volví a su cuello para dejar pequeñas mordidas que mañana serían marcas.

''Oye, tenemos un trato de hacer marcas no visibles para que el mundo no arda''.

Reí suavemente.

''Somos pareja, que el mundo se incedie''.

Volví a mi tarea.

Nos separamos para que yo me quitará mi blusa y pantalón.

''Eres tan hermosa''.

Sonreí e hice que se acostara.

''No toques''.

Lleve sus manos sobre su cabeza.

°°°

''Noah''.

''¿Uhm?''.

''El teléfono está sonando''.

Él me abrazo con más firmeza.

''Deja que suene''.

''Es el mío''.

Admito que yo tampoco quería moverme pero es que era el tono de Alejandro y coño.

Me estire un poco y alcance el celular.

''Hola, Ale ¿Qué pasó?'' - contesté y Noah empezó a acariciar mi cintura - ''Quédate, tranquilo''.

Le susurré y soltó una risa ronca.

''Hola Sam, ¿Todo bien?''.

Le di un manotazo a Noah para que dejará la vaina.

''Si, todo bien''.

''Quería llamar para saber como estabas, Sebastián nos contó lo de Julio, Bea esta en Nueva York''.

''Estoy bien, fue duro de escuchar pero debemos seguir'' - empecé a acariciar el cabello de Noah - ''Ale, estoy algo ocupada, te llamo cuando pueda. Adiós''.

Colgué y volví a acomodarme.

°°°

''Están tocando la puerta''.

A Venezuelan In The Fame.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora