Capítulo Dieciocho.

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''Dejen a Bea, chismosos''.

Reclamé en voz alta y Sebastián me agradeció con la mirada.

''¿Fue malo?''.

Negué a la preocupación de Julio y se quedó quieto, al igual que el resto.

''Algo antiguo, no importa ahora. Esta todo resuelto''.

Me senté al lado de Noah y él me jalo hasta sentarme en sus piernas.

''¿Todo está bien?''.

Me susurró y yo lo mire.

''Si, todo en orden. Es más de mi mamá que mío, ella estará bien, tiene a su mejor amiga y a su esposo''.

Me recosté de él y empecé a jugar con sus dedos de forma distraída.

''Lamento no haber ido''.

''No era necesario, tranquilo''.

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''Al fin en casa''.

Me lancé a la cama y suspire. Olía a Noah.

''Sam, ya recogí lo tengo que llevarme, en un momento me voy''.

Se sentó a mi lado y le agarré la mano.

''Te voy a extrañar, cuídate mucho''.

''Cuenta con eso''.

Bostece.

''¿Quieres que te lleve al aeropuerto?''.

El negó.

''Ya pedí un taxi, estas exhausta. Manejaste en Lechería y Caracas, más las horas de vuelvo''.

Me beso el hombro y solté la típica risita ante las cosquillas.

''Soy una luchadora''.

Sonrió.

''Claro que si''.

El teléfono de Noah sonó y ambos supimos que era el taxi que había llegado.

''Anda, me escribes cuando llegues''.

Me dio un beso y se levantó.

''Te amo''.

''Yo también, Noah''.

Cuando escuche que salió de la casa, cerré los ojos y dormí.

Nosotros habíamos llegado de Caracas a New York a las nueve de la mañana y cuando me desperté eran las cinco.

Nosotros habíamos llegado de Caracas a New York a las nueve de la mañana y cuando me desperté eran las cinco

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Menos mal iba a dormir un ratico nada más.

Me estire me levanté y llame y Harry.

''Háblame, sol. Se que estas en Nueva York, no te veo llegando a mi casa''.

A Venezuelan In The Fame.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora