Blood Singer.

07.

Hyoga era un joven que siempre tuvo el rechazo de Camus, su padre, quien había tenido que hacerse cargo de él cuando su esposa, Natassia, había muerto en un accidente cuando un tráiler de carga la arrolló.

Su relación con Shun no era la mejor ya que no lo amaba, no lo quería de mínimo ya que había puesto sus ojos en Ikki, ese bronceado lo hacía derramar sus mieles y eyacular en su honor aunque en las últimas veces eyaculaba y el semen salía frío.

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Seiya se encontraba dando vueltas en su habitación pensando en qué hacer para enamorar al hermano de su amigo ¿será el perfume? ¿un outfit diferente? Por último se recostó en la cama y pensó en lo que los días ya pasados le habían traído, como cuando a su profesor Sísifo lo veía con un humo de color verde pastel y a su esposo Cid con un humo de color morado ¿qué será lo que le pasaba?

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Radamanthys se había quedado callado con la presencia de aquel moreno, no sabía si era miedo o esperaba que él tuviera la iniciativa.

-Y dime... -fue interrumpido

-No hables

-¿Disculpa?

-Por favor -dijo con un suspiro- no hables, es más fácil si no hablan

Radamanthys se volvió a callar y decidió sentarse en uno de los sofás dando a entender la invitación a que el otro hiciera lo mismo. Ikki se sentó con el rechinar del cuero que lo incomodaba aún más.

-Si no quieres tener sexo lo entiendo

Ikki se sorprendió.

-Después de todo yo no pagué por esto -dijo acercándose la bebida mientras su sonrisa dibujaba el cristal del vaso

-Ya veo -dijo Ikki un tanto avergonzado por la situación

-¿Puedo saber tu nombre? -dijo el hombre de traje

-Mi nombre es I... -unos sonidos bastantes sonoros interrumpieron al moreno

¡Aaaagh!

Ikki y Radamanthys se quedaron totalmente callados tanto de voz como de pensamiento al escuchar los quejidos (que más bien eran gemidos) de alguien más que estaba literalmente a un lado de ellos y el moreno sabía perfectamente de quién provenían dichos sonidos.

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FLASHBACK.

Albafica siempre fue un chico atento y tranquilo a pesar de no socializar con las otras personas, su padre, Lugonis, era un médico pediatra que ejercía su labor con tanto empeño y la cual le daba la experiencia para lidiar con su pequeño.

A pesar de la "escondida" relación que su padre mantenía con Zaphiri nunca le incomodó a Albafica, por el contrario, agradecía ya que muchas veces este intercedía en los castigos y regaños además de consentirlo con alguna otra cosa que quisiera.

Cuando Albafica decidió tener pareja Lugonis no se opuso ante dicha decisión, su hijo ya estaba en la última etapa de adolescencia y necesitaba tener experiencias propias, sin embargo su sorpresa fue poco grata al darse cuenta de la pareja de su hijo y peor fue la situación cuando vio la escena de una pareja (uno de ellos era su Albafica) comiéndose a besos en su sala.