Cuarenta y ocho. (2)

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Dos años después.

Felix dejó la última caja en la sala de estar, con un jadeo cansado, y limpió de su frente unas gotas de sudor. Era verano y el sol estaba en su punto más alto. Su novio no estaba a la vista, lo que le hizo fruncir el ceño. Podría jurar que Changbin había entrado a la casa después de que Felix sacó de la cajuela de su coche la caja que faltaba. Caminó hacia la entrada y observó desde la puerta su coche, que se encontraba cerrado y vacío. Regresó a la sala de estar, donde no había más que un sofá y montones de torres de cajas por todos lados. 

Escuchó una risita que de inmediato le sacó una enorme sonrisa, y ésta pronto se convirtió en una mueca malvada al entender que su novio estaba escondiéndose detrás de una pila de cajas; con lo pequeño que era, seguro no tenía ni que agacharse para pasar desapercibido. El más alto caminó, guiándose por las pequeñas risas que el mayor no notaba que Felix podía oír. Cuando se encontró detrás de Changbin, se aproximó con sigilo y rodeó su cintura con sus brazos en un instante, haciendo que Changbin gritara, dando un salto por el susto.

Las carcajadas roncas de Felix llenaron el lugar de inmediato, mientras su novio lo veía con el ceño fruncido y un puchero molesto. Felix se encargó de borrar esa expresión de su rostro a besos. Hace unos meses habían estado buscando una casa a las afueras de la ciudad para poder vivir juntos. Felix había terminado el colegio hace bastante y ambos habían conseguido trabajos muy buenos. Changbin había sido contratado por una empresa de idols para que escribiera y compusiera canciones, y Felix había decidido hacerse maestro de inglés. Sí, había tomado el camino fácil.

Estuvieron vaciando cajas y acomodando cosas hasta que ambos estuvieron exhaustos, y decidieron ir a dar un paseo por los alrededores y aprovechar para comer en algún lado. Felix esperaba a que Changbin acabara de ducharse para irse, sentado en el sillón y viendo vídeos en su celular cuando recibió un mensaje. Era Chan, preguntándole si le gustaría que se vieran, e invitando a Changbin también. Felix pensó su respuesta durante lo que parecieron siglos. 

Ellos no habían visto a Chan en muchos meses. Unos días después de que Changbin decidiera darle una segunda oportunidad a su relación con Felix, parecía que Chan había desaparecido de la faz de la tierra. Las pocas veces que fueron a su departamento, él no estaba. Y su celular jamás estaba prendido. Con el tiempo, dejaron de buscarlo, y cuando era él quien los buscaba, sólo se veían un rato. Parecía constantemente ocupado con algo y empezaron a distanciarse, por lo que fue una gran sorpresa para el de pecas cuando recibió el texto. Decidió esperar a que Changbin saliera para contestar, y cuando le preguntó, Changbin asintió con una sonrisa.

"Llevamos demasiado sin vernos, me sorprende que te haya mensajeado a ti en vez de a mí, ¿debería estar ofendido?" Changbin llevó su mano a su pecho, fingiendo una mueca lastimada, mientras Felix negaba con la cabeza, una sonrisa en su rostro.

"Cambiaste tu número y no le dijiste nada, amor." Defendió a su amigo australiano, y la expresión de Changbin se puso seria de repente, admitiendo su derrota.

Felix le contestó a Chan dónde podían verse y a qué hora, mientras Changbin murmuraba algo sobre 'no tener la culpa de que su celular se mojara.' A pesar de que faltaba aún para que los amigos se reunieran, la pareja salió de su nueva casa con sus manos entrelazadas, dispuestos a pasear por la nueva zona. Era el último día que ambos tenían libre, porque al día siguiente ambos iniciarían en sus respectivos trabajos, así que se permitieron disfrutar de una tarde sin responsabilidades.

Cerca de su nuevo hogar había un gran parque que tenía inclusive un lago en el centro, donde una pequeña familia de patos parecía habitar. Duraron un tiempo ahí, sentados en una banca y observando la tranquila superficie del agua, que sólo era alterada cuando un patito pasaba nadando por ahí. Changbin recargó su cabeza en el hombro de Felix, sus manos aún entrelazadas y descansando en el regazo del mayor. 

Next door. [Changlix]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora