Amor de Atletas. (Jungkook. Fanfic) [Completada]

C A P I T U L O 11 #3

SU MIN

Me estaba levantando con la mayor pereza en esta vida. Cuando miré a la cama de al lado, Yu Qi estaba casi en el suelo; un pies tocando el frío piso y una mano igual. Su mejilla estaba siendo aplastada por la almohada. De seguro llegó agotada de la competencia, ¿Ganaría? Le preguntaré cuando se despierte. Me levanté de la cama, tomé mi toalla y salí del dormitorio a mi gran destino: el baño.

Estaba vistiéndome cuando mi celular empezó a sonar. Me lancé sobre la cama y lo tomé de la mesita de noche: llamada de Kook. Tomé todo el aire necesario y con una enorme sonrisa en mis labios le contesté.

-¡Kook!-grité con mucha emoción.

Me quedé inmóvil al ver la cara de pocos amigos de Yu Qi. La levantaron de su profundo descanso.

Soy una desgraciada.

-¡Susu! ¿Cómo estás? ¿Estás bien?-me sonroje por aquella preocupación que lo invadía-Dime, ¿Estás mucho mejor? Sé que ha pasado un mes desde lo que sucedió, pero no puedo sacarme de la cabeza la preocupación que tuve al saber que habías desaparecido.

-Si, estoy bien. La manera en que lo dices me hace pensar que ya estás más relajado y a la vez preocupado-sonó una pequeña risa-Déjame decirte que estoy perfectamente bien. Tú, ¿Cómo estás?.

-Feliz por tener tiempo de llamarte, de escuchar una vez mas tu voz-sentí mis mejillas arder-No te veo pero apuesto a que te sonrojaste.

-No, no es así-mentí.

Mentiras que son verdaderas.

Tuvimos hablando de cosas sin sentidos, como por ejemplo: de que la tierra es redonda o plana, que si hace frío en la antártica, que si los gatos no vuelan. Toda una conversación anormal entre los dos. Llegó el momento en que nos despedimos, y fue triste. No me acostumbro al hecho de que solo sean llamadas por pocos minutos, pero él me debe de extrañar, así que no justifico los hechos.

Salí ya lista de la habitación y le pedí disculpas a Yu Qi con un enorme abrazo por haberla despertado cuando sabía que estaba agotada y sin energías por la competencia. Le hablé a kook de la fiesta en donde asistiría con Momo, casi le da un ataque al saber que yo, su novia, estaría en una fiesta sin su mirada de protección. Le indiqué que podía llevar a alguien, le dije que podía llevar a uno de los chicos, sea: Tae, J-Hope, o alguno de los demás, de todas maneras dijo que no. No confía en sus propios amigos, qué malo.

Llegué al gimnasio y empecé a calentar para la práctica de hoy. Sabía que la entrenadora ya venía con sus palabras de que solo faltaba un mes para las nacionales. Las chicas que estaban en el área conmigo, aquellas que compiten en la categoría de equipo, se encontraban sentadas formando un pequeño circulo. Si la entrenadora llega y las ve como las cómodas del año, les dará un castigo. La entrenadora entró. Las chicas rápidamente se colocaron en posición de calentamiento. Sonreí por aquello.

-Buenos días, Chicas-dijo la entrenadora al momento que caminaba y se colocaba de frente a todas.

-¡Buenos días, entrenadora!-dijimos todas al unisono.

-Las nacionales son en un mes. Japón espera que llevemos atletas dignos de medallas de oro. Si no consiguen aunque sea un medalla de oro, me veré obligada a castigarlas ¿Bien?-me sobresalté por sus palabras tan....secas-Ahora, empecemos con la rutina en grupo.

Las chicas que van en la categoría en grupo se colocaron en el centro del salón. Su rutina va acompañada de las cintas. Empezaron a bailar, lo hacían tan elegante y pulido, como si estuviesen practicando por mucho tiempo.