Como digas, Maestra -Clockwork x Female Reader (CANCELADA)

Capítulo 1

-(Nombre)... ¡(Nombre)!- Reaccionas ante los llamados de tu madre. La miras, un poco avergonzada. –No has tocado tu plato mi amor.- Realmente no tienes hambre. Solo comes porque tu madre te obligó.

-No tengo hambre mamá.- Tu madre te mira preocupada.-No... No es por lo que piensas. Simplemente, no quiero comer.- Miras a tu madre en busca de su aprobación, a lo cual, ella suspira resignada, tomando el plato y dejando tus sobras en la olla con comida.

Te levantas y vas a tu habitación, te recuestas en la cama mirando el techo pensando en lo que pasó la semana pasada. Cada vez que recuerdas su rostro te da escalofríos. Simplemente quieres olvidar aquella silueta que te causa pesadillas. Porque sí, simplemente te da problemas por la noche, con miedo de que vuelva. Porque de día, no dejas de actuar como siempre. Eres una chica normal, sociable y divertida. Pero de noche, te conviertes en una chica temerosa.

Despiertas de tus pensamientos y tomas tu celular, lees los mensajes de tus amigos, todos son así: "¿Por qué no has ido a clases?" "¿Estás bien?" "¿Te comió el cuco o qué diablos?". No les vas a contar ni loca sobre por qué no vas a clases. Vas a un psicólogo cada día, lo cual odias con toda tu alma. Por más que le cuentes sobre aquel psicópata, no lo capturarán antes, ni se te calmará el miedo.

-Cielo- Tu madre entre abrió la puerta, mostrando únicamente su cara.- Tengo que ir al trabajo, cuídate ¿sí?- Le sonríes y asientes con la cabeza. Tu madre te sonríe de vuelta y cierra la puerta. Te quedas en silencio, escuchando como tu madre se va. Un escalofrío recorre tu cuerpo, comienzas a imaginar todo tipo de cosas con el chico de la semana pasada. "¿Y si aprovecha que estoy sola para matarme?". Sacudes la cabeza intentando quitarte esas absurdas ideas. Debes calmarte.

Te recuestas en tu cama, apoyando tu oído en la almohada, intentando dormir. Al final, tus párpados comienzan a pesar, y terminas por dormirte.

Te despiertas y miras por la ventana, es de noche. Te sientas violentamente en la cama y comienzas a respirar de manera agitada y forzada. Sudas muchísimo, y tiemblas. Tomas tu celular y ves la hora, son las 8:07 p.m. Sueltas un suspiro y vas a tu armario. Tomas pantalones largos y un jersey de lana, un gorro, bufanda y guantes. Te pones todo y guardas tu celular en el bolsillo de tu pantalón, tomas un par de billetes y bajas. Te pones tu abrigo y sales de tu casa.

Caminas por calles muy transitadas, viendo ropa, comida, y juguetes en las vitrinas de cada tienda. Nada te llama especialmente la atención, pero querías aprovechar la hora para no estar en tu casa y sufrir la paranoia de que alguien quiere matarte.

Te pierdes en tus pensamientos, ni si quiera te detienes para ver las cosas de las vitrinas, te olvidas totalmente de aquella cara que te aterra. Es como si te hubieras quedado dormida.

Sientes un aliento frío en tu nuca, el cual te hace reaccionar. Levantas la cabeza, mirando hacia todas partes, dándote cuenta de que la calle en donde estás, está totalmente desolada. Intentas ubicarte, y buscas algún punto de referencia. Pero no reconoces nada. Sientes que nunca has estado en esta calle. Comienzas a alterarte y buscas tu teléfono, esperanzada de que tus padres pueden venir a buscarte, o por lo menos, ayudarte a regresar a casa. Pero para tu sorpresa, tu celular no prende. Presionas el botón de encendido repetidamente, cada vez más desesperada, pero es inútil.

Te sobresaltas al escuchar ruidos de pasos, comienzas a girar la cabeza en todas las direcciones posibles buscando al causante de aquellas pisadas.

-¿¡Quién anda ahí?!- Intentas sonar segura de ti misma, a pesar, de que por dentro estás totalmente aterrada. -¡Vamos! ¡Sal de ahí!- Buscas algo para defenderte. Algo como un palo o un pedazo de vidrio. Pero no encuentras nada. Decides quitarte la ropa que te estorba, como el gorro, la bufanda, los guantes y tu abrigo. Los arrojas al suelo y comienzas a correr con todas tus fuerzas a la dirección contraria de donde según tú, vienen los pasos.