por ser diferente

El despertar de una nueva vida

Abri mis ojos lentamente, dejando ver asi, la habitacion en la que me acojieron mis nuevos amigos. Al parecer me quede dormida. Intentare no hacer ruido para no despertar a los demas, ya que ayer nos acostamos tarde y son las 7 de la mañana. Me puse en pie, sin hacer ningun ruido, cuando veo a Sam ya vestida de un lado para otro.

- buenos dias bella durmiente. saludo Sam corriendo.

- como es que ya estais despiertos? si son las 7. dije aun adormilada.

- porque la camioneta que nos va a recoger va a llegar de un momento para otro.

- que?. conteste con cara de susto.

- si, asi que vistete. Los demas estan fuera. completo la rubia.

Por Dios... no me va a dar tiempo. Pero al parecer, si que me sio tiempo. Me vesti a toda velocidad, con la ropa que llevaba ayer y me dirji hacia la entrada.

- hola. saludaron mis compañeros al unisono.

- hola. les conteste.

- esta a punto de llegar, que nevios. solto Eli.

- si... que ganas. completaron Sam y Harri a la vez.

-si... oh mierda, y mi maleta?. dije preocupada.

- la tengo yo, despistada. contesto Harri con una sonrisa de burla.

- oh gracias, me salvaste la vida. dije con una mano en mi pecho.

Hablamos durante un rato mas, hasta que paso lo que todos esperabamos. La furgoneta que nos sacaria de este odioso lugar. Todos subimos, sin escepciones.

- estoy impaciente por llegar y ver como es la nueva escuela. dijo Harri en tono de voz alegre e infantil

- yo tambien, hermanito.

- y... como nos sentamos? dijo Harri, con cara de estar pensando.

-mmm... uno tendra que ir solo. dijo Eli.

- yo me pido con Cat. dijo Sam a una velocidad increible.

- que? no. dijeron Eli y Harri.

-yo queria ir con ella. dijo Harri.

- me la he pedido antes. se defendio Sam

Mientras ellos seguian discuriendo yo me di cuenta de algo.

- heeeeeyyyy, callad! grite. todos se me quedaron mirando.

- tambien podemos ir, 3 delante y los otros 2, en las plazas 2 de atras. continue.

Todos se quedaron pensativos, y luego asintieron en señal de aprobacion.

- pues las tres chicas nos ponemos delante...y... empezo Eli.

- no. la corto Harri.

- tengo la solucion. dije.

- eso, que elija Cat. dijo Sam. Todos asintieron, asi que pense y se me ocurrio algo.

- para que no haya peleas, vosotros tres hireis delante y yo con James atras.

Los demas me miraron con cara de desaprobacion, pero ya habia tomado una decision.

- vale, si quieres ir con el, vete. dijo Harri, poniendose dramatico.

Seguimos discutiendo un poco, hasta que paramos frente a una enorme casa blanca. Delante de la gigantesca casa, estaba una familia. Se abrazaban y lloraban. Comence a pensar que, hasta hace unas horas, yo misma me estaba preparando para vivir algo asi. Observaba la escena, pensando en que a ella le hubiera gustado vivir un momento asi. Que sus padres le dijeses que se quedara, y no por el dinero, sino por lo que me querian. Pero al parecer no todos merecemos a gente que nos quiera, y yo era una de esas que no las merece. El por que, no lo se. Solo se, que ese momento no me llego.

El ruido de la puerta de la frugoneta abriendose, me saco de mis pensamientos. Intente mirar al lugar del ruido, pero no consegui llegar, ya que me encontre con unos enormer y preciosos ojos. Eran azules, azules claros como el cielo. Y transmitian tanto frio como el hielo, pero alavez me atraian de forma incomprensible.

- Hola. saludo una voz sin vida, que al parecer salia de esos carnosos labios, que se encontraban bajo su boca.

- hola. le conteste.

- sientate. le dije de forma amistosa.

- gracias. su voz sonaba fria y triste.

Estubimos un rato en silencio, yo escuchaba la conversacion de los de delante. Pero me aburria y decidi sacar tema.

- siento que tengas que dejar atras a tu familia.

- no pasa nada, lo superare. Tu tambien has dejado a tus familiares, verdad?

- mmm... si, pero descubri que no me querian... y me escape, asi que, eso facilito las cosas

- lo siento. dijo con voz compasiva.

- no... no pasa nada. aunque recordar aquello, hizo que mis ojos se humedecieran y las lagrimas amenazaran por salir. Pero las retube.

- y... cual es tu nombre?. pregunto, ya menos frio y distante.

- Cat, llamame Cat. Y tu eres... James, verdad?. dije, recordando el momento en que me lo dijo Sam.

- si.

- hey, James has hecho una nueva amiga. dijo Harri, girandose para hablarnos.

- tu callate. dijo James con voz cortante y fria de nuevo.

- no os llevais muy bien, no? pregunte midiendo cada una de mis palabras, para que no sonaran agresibas.

- no, nos llevamos bien. pero es que James esta delicado. dijo Harri