𝓹𝓪𝔂 𝓶𝓮 𝓪𝓽𝓽𝓮𝓷𝓽𝓲𝓸𝓷! © (YoonMin) +18

V

JiMin estaba impaciente zapateando el piso con su pie sentado en la silla enfrente del escritorio de YoonGi, sus ojos lo miraban fijamente sin apartar la mirada mientras fruncía el ceño. Se estaba desesperando esperando una respuesta por parte de él, decidiendo si podría ir a la universidad o no.

— ¿Qué piensas ahora? ¿Crees que pueda ir? — El ruido provocado por JiMin sonaba cada vez más fuerte en la callada habitación, estresando a YoonGi y provocando un gran dolor de cabeza.

— Te dije que aún no lo había decidido, no te hagas ilusiones. Sigo pensando que es una mala idea el que vayas personalmente. — YoonGi masajeaba su frente mientras veía algunos documentos de su trabajo, no podía concentrarse si JiMin seguía interrumpiendo cada vez que hacía algo importante.

Ya había pasado una semana desde el incidente de JiMin en la universidad, las clases ya habían comenzado el día anterior, por lo que JiMin solo se encontraba hecho una bola de nervios tratando de convencer a YoonGi. No quería perder el tiempo en pequeñeces cuando en este momento podría estar en la universidad haciendo amigos y estudiando.

JiMin se levantó de la silla y tiró todos los papeles en los que YoonGi estaba trabajando al suelo, llamando su atención mientras se sentaba en el escritorio frente a él.

— Tú me ilusionaste con esta idea, YoonGi. No fue mi idea, fue tuya. — JiMin lo tomó de la corbata y lo acercó a su rostro. — Cumple con lo que prometiste.

YoonGi lo miró seriamente y le dio un manotazo para que lo soltara y simplemente asintió restándole importancia a lo que JiMin decía tomando su teléfono.

— No hagas eso. — JiMin le apuntó.

— ¿Hacer que JiMin? — Levanto la vista de su teléfono y miró el rostro molesto del menor.

— Eso. — Movió sus manos señalando todo — Asentir a lo que te digo e ignorarme, como si yo y mi opinión no importara.

JiMin comenzó a tener malos pensamientos, los sumisos nunca opinan. No tienen derecho, los compran y ellos obedecen. Sin embargo, JiMin alejó esos pensamientos, ellos eran pareja. Su opinión también importaba en la relación, tenía que importar.

— Yo realmente quiero ir, YoonGi. — JiMin trago saliva. — Sé que no puedo decidir por mí mismo, pero realmente, si no estás de acuerdo conmigo yendo a la universidad, realmente desearía irme de esta casa y no mirarte la cara nunca más.

JiMin no quería decirle esas cosas que sabía lo iban a molestar, pero realmente necesitaba hacerlo recapacitar y que finalmente tomará una decisión. Él sabía que YoonGi jamás lo dejaría irse, sin embargo, todo el ambiente se sintió pesado cuando los ojos oscuros de YoonGi se detuvieron en su rostro por mucho tiempo y el agarre de su teléfono era más fuerte, con la quijada tensa.

El tiempo en el que YoonGi se quedó en silencio, JiMin comenzó a sentirse más pequeño y con miedo de lo que iba a responder.

YoonGi se levantó de su asiento y se acercó al cuerpo del menor inclinándose contra él, dejando sus rostros lo suficientemente cerca como para que JiMin sintiera su aliento caliente rozarlo.

— Repite una vez más lo que dijiste. — La voz de YoonGi sonó baja como un pequeño susurro, pero ambos estaban tan cerca que JiMin podía sentir el duro tono de su voz haciéndole temblar bajo su cuerpo.

— No lo repetiré una vez más — JiMin se salió debajo del cuerpo de YoonGi e hizo espacio entre ellos, lo estaba poniendo nervioso y necesitaba calmarse. No necesitaba más manipulación de parte de YoonGi para hacerlo sentir mal por algo que él realmente deseaba.

— Entonces vete a tu habitación. — YoonGi lo miró desde su lugar mientras apretaba sus puños. Estaba molesto, JiMin lo sabía por eso la distancia. — Necesito tiempo para pensar, solo.