𝓹𝓪𝔂 𝓶𝓮 𝓪𝓽𝓽𝓮𝓷𝓽𝓲𝓸𝓷! © (YoonMin) +18

XIII

YoonGi miraba fijamente cómo el menor repasaba sus manos una vez más con sus dedos. Otra vez habían vuelto al principio, cuando JiMin apenas podía tocarlo sin sentir que se lastimaba. JiMin seguía acariciándolo una y otra vez sin mirarlo a la cara, ambos estaban sentados en la cama de JiMin una vez más apartados el uno del otro.

— ¿Cómo te sientes? — Pregunto YoonGi en voz baja. — ¿Duele?

JiMin suspiró mientras asentía.

— Es soportable, pero está ahí... — El chico finalmente subió la mirada y observo el rostro de YoonGi que lo miraba seriamente. — Llevará tiempo hasta que me acostumbre una vez más, la última vez nos tomó dos años.

YoonGi gruñó alejando sus manos del menor y levantándose de la cama.

— La última vez no sabía lo que se sentía tocarte o tenerte entre mis brazos JiMin. — El menor hizo una mueca. — ¿Cómo vamos a aguantar esto?

— YoonGi yo también quiero tocarte, quiero abrazarte, sentir tu cuerpo junto al mío, pero no puedo. — Su voz sonó quebrada a la vez que sentía sus lágrimas llenar tus ojos. — Tienes que lograr que confíe en ti... Que mi cuerpo se acostumbre a tu toque otra vez, si me amas, tienes que ser paciente.

YoonGi asintió y se acercó una vez al menor que había dejado salir algunas.

— ¿Puedo...? — YoonGi acerco su mano a la mejilla de JiMin y este asintió lentamente, dejándose tocar por la mano de él apoyándose en ella. — ¿Cómo se siente?

— Cálido... — YoonGi sonrió. — Cuando tocas mis mejillas siempre es cálido.

— Eso es un inicio... — JiMin asintió mientras se aprovechaba del único toque que no lo lastimaba. — Iremos poco a poco, una vez más.

***

— Jungkook... — Le llamo Lisa mientras ambos estaban sentados en el campus. — No estás escuchando una vez más.

Jungkook miraba a la nada mientras trataba de organizar sus ideas, se encontraba tan molesto. JiMin no quería escucharlo y no importaba cuanto le dijera que YoonGi no era quien él creía, este solo lo odiaba más con el pasar el tiempo y lo defendía con su vida.

— ¿Qué podemos hacer Lisa? — La chica lo miro seriamente. — La única que tiene algún poder de hacer algo eres tú... ¿Por qué no lo has hecho aún?

Lisa negó para luego tomar sus manos.

— Escúchame bien, Jungkook. — Comenzó a hablar. — JiMin no nos conoce, no sabe de su pasado, las pocas preguntas que le he hecho solo me da respuestas vagas. Él confía en YoonGi y es lo único que tiene, si nosotros intentamos algo en contra de él nos va a odiar por el resto de nuestras vidas, ¿Entiendes?

— ¿Y qué le diremos a Mina? — Lisa desvío la mirada. — ¿Lisa?

— No le diremos nada, no vamos a ilusionarla con un hijo que no quiere saber nada de ella.

— ¡No podemos hacer eso! ¡JiMin tiene que saber la verdad! —

— ¡Cállate ya, Jungkook! — Le grito la chica ya molesta. — Si sigues así lo mejor es que vuelvas a Busan, no puedo soportar que te comportes como un niño malcriado y lo arruines todo.

— Y yo no puedo soportar que yo sea el único al que le preocupe el bienestar de JiMin. — Jungkook se levantó de su asiento, dejando a Lisa sola con una mueca.

Lisa bajo la cabeza, escondiéndola entre sus brazos en la mesa, hablar con Jungkook y razonar con él, era cada vez más complicado. Por supuesto que quería que JiMin volviera a casa, pero también veía lo mucho que JiMin amaba a ese hombre, no podía simplemente despojarlo de su felicidad. Hasta cierto punto pensaba que tal vez JiMin de verdad había elegido estar con él y no con su familia.