Solo hay recuerdos de ti y de mí en esta ciudad, en esta mente, en este corazón. Pero es que no puedo caminar por estas calles sin recordarte, sin que venga a mi memoria ese dulce recuerdo tuyo, de nosotros caminando juntos cogidos de la mano o besándonos en cualquier lugar. Es difícil para mí pasar por los lugares que frecuentaba contigo. Es difícil saber que ya no estás ni estarás más, para hacer de un día oscuro uno lleno de luz, para alegrar mis días tristes con tu sonrisa, esa sonrisa tuya de la que me enamoré desde el primer instante en que nuestros ojos se encontraron por primera vez.