Hermanas

capítulo 3

*En la habitación*

Mimi, Ricky y Miriam estaban saliendo de la habitación cuando un muchacho se estampó con ellos

-Mimi Mimi- decía intentando coger aire después de la carrera

- ¿Dime Jeim, pasa algo?

-Es tu hermana- decía angustiado

-Mi hermana? ¿Qué coño pasa con mi hermana? - Interrumpía Mimi – Joder Mimi déjale hablar hostias- Le gritaba Ricky, eso no pintaba nada bien

-La vimos pasar antes para afuera, y Borja poco después Borja se ha enterado de que sois hermanastras y ha salido a buscarla

-Me cago en la puta madre del desgraciado ese- maldecía mientras salía a correr

-Gracias tío- gritaba Ricky desde el pasillo

Los tres salieron a la carrera a buscar a ese desgraciado, sabían dónde era capaz de llegar y realmente se temían lo peor, llevaban mucho tiempo solos arriba y no sabían cuánto tiempo llegaban juntos, si el muchacho les avisó al momento o cuando se dio cuenta que no aparecían.

-Me cago en dios, dónde coño está, joder- Decía Mimi mientras se retiraba una y otra vez el pelo con la mano y con la otra se comía las uñas

-Calma joder, vamos a distribuirnos, Ricky ve hacia donde están los coches aparcados y mira si el de Borja está, Mimi recorre los putos alrededores de la casa y yo voy a buscar dentro y me quedo por aquí por si vuelve

Sin mediar más palabras salieron a correr, Mimi miró por la piscina, por los arboles de delante, se maldecía una y otra vez por haber traído a Ana a esa fiesta, por hacerle caso a su madre y por todo joder.

De repente recordó que antes de bajar Ana hizo un comentario sobre el lago de detrás de la casa, y fue corriendo hacía allí.

Y al llegar se encontró lo que más temía

-Suéltala hijo de puta- dijo con la lágrima en los ojos. Ana estaba apoyada en la pared, en sujetador y llorando, a Mimi se le rompió todo cuando la vio así

-Que vienes a rescatar a tu hermanita, vamos rubita si seguro que no os lleváis muy bien, ella es mucho más dócil que tú

-Te he dicho que la sueltes- como respuesta Borja besó el cuello de Ana
Mimi no se lo pensó dos veces se acercó a él y le dio un puño en toda la cara

-Me cago en mis muertos- decía mientras se tocaba la muñeca- joder

-Ana fue corriendo a Mimi y la abrazó – Estás bien? ¿Te ha llegado a hacer algo?

Antes de que Ana pudiera responder Borja cogió a Mimi del cuello amenazándola, tenía sangre en la nariz del golpe, pero más que dolorido estaba con rabia.

-Te vas a enterar zorra drogadicta- acto seguido comenzó a besarla.

-Déjala a ella que la tienes muy vista, ¿Acabamos lo que empezamos? -  Ana que hasta ahora había estado en shock dio un paso y se bajó lentamente la traba del sujetador.

Borja la miró y soltó a Mimi, aprovechó para pegarle tal patada en los huevos que lo dejó de rodillas.

Ambas aprovecharon para salir de ahí

-Ana, estás bien? Dime que no te ha hecho nada ese desgraciado- Decía Mimi angustiada mientras le colocaba el pelo

Ana negó con la cabeza agachada, en parte por sentirse culpable de toda la situación, en parte por el miedo que acababa de pasar.