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-Sal de una vez, _______- Me pidió Jisoo ya algo cansada.
-Es que no me convence este -Dije mientras me miraba al espejo. A través de este pude ver como ella rodó los ojos.
-Nos vamos a una fiesta no a una boda -Se levantó del sofá y caminó hasta quedar a mi lado. -Créeme, te ves genial con ese vestido -Me dijo con una sonrisa. -Y ahora vamos. Somo jóvenes, estamos en París, disfrutemos de este viaje ¿si?
-Tienes razón -Dije sonriendo. Cogí mi bolso y salimos de la habitación del hotel. -¿Y donde vamos a ir? -Pregunté curiosa.
-A una fiesta, pero no sé donde -Dijo, rodé los ojos.
-¿Es enserio? -Paré de andar y ella imitó mi acción.
-¿Que? Soy de Seúl no de París. No me conozco las calles -Dijo mientras se encogía de hombros.
-¿Y que propones que hagamos? -Pregunté mientras apoyaba mi peso sobre la pared.
-Pues... -Su vista se desvió hacia un grupo de personas jóvenes. Este grupo llamaría la atención de cualquiera. Parecían modelos, la forma de vestir, los cuerpos que tienen... Vimos como entraron en la discoteca del hotel -Ya lo tengo -Dijo con una sonrisa que asustaba un poco.
-No Jisoo, se en lo que estás pensando. Estoy más que segura de que no podremos entrar -Dije, ella rodó los ojos.
-No seas tan negativa. Solo vamos a intentarlo, si funciona bien y si no pues... Habrá que pensar en otra manera de entrar -Me agarró del brazo y fuimos hasta la sala en donde era la fiesta.
En la puerta había un grandullón vestido con una traje negro y con una camisa blanca. Se encontraba muy serio pero cada dos por tres desviaba su mirada para ver a algunas de las chicas.
-Esto será muy fácil -Dijo Jisoo con una sonrisa burlona.
Caminó hasta el grandullón y yo fui detrás suya. Se paró delante de este con una sonrisa seductora. Puso su mano derecha en su hombro y fue bajando de forma muy lenta para luego quitarla cuando llegara hasta su estómago. Este se puso nervioso.
-Ho-Hola -Dije el hombre con nerviosismo.
-¿Estás nervioso? -Preguntó Jisoo con inocencia en su voz. Este tragó en seco y miró a otro lado.
-Para nada, señorita -Dijo con la voz algo temblorosa.
-Es de mala educación no mirar a alguien cuando está hablando -Dijo, me miró y me guiñó un ojo. Intenté no reirme, si lo hacía todo se echaría a perder. -Tu nos dejarías entrar ¿verdad? -El hombre volvió a mirarnos, se veía que lo estaba pensando si el dejarnos entrar a la fiesta o no.
-Si no estáis invitadas no.. -Jisoo le interrumpió.
-Si nos dejas entrar estaríamos muy agradecidas -Dijo con voz baja y en un tono sexy. Me estaba poniendo nerviosa hasta a mí, que me encontraba detrás suya.
-Per..
-¿Te gusta el pollo frito? Por qué si te gusta te puedo comprar.. -Le tapé la boca corriendo. El hombre la miró raro.
-Lo que mi amiga quiere decir es que estaríamos muy, pero que muy agradecidas ¿verdad que si? -Dije con una sonrisa coqueta, Jisoo asintió. El volvió a sonreír y asintió
-Bueno, no puedo negarle la entrada a dos hermosuras -Dijo y se echó a un lado para que entraramos.
Una vez dentro le di un golpe en brazo, esta se quejó
-¿Pollo frito? ¿Enserio?
-Me dejé llevar por el momento -Dijo encogiendose de hombros. Yo rodé los ojos. -Vamos a la barra -Dijo tirando de mi brazo. Todo era muy elegante, se notaba que lo que llevaba la gente no era para nada barato. -Dos shots -Le dijo al camarero. Este nos miró serio.
