Cap#10

582 56 7
                                    

Activa el vídeo hasta que veas las próximas letras negras

Suspiro llena de agotamiento, todo lo que se avecina será… no encuentro la palabra, ¿cómo lo diría? Estoy en estos momentos frente al espejo arreglándome el cabello y lo único que puedo sentir en estos momentos es un vacío en el estómago, no logro diferenciar entre nervios, preocupación o… miedo.

—Pensar no ara que las cosas se solucionen— me dije a mi misma, golpeé levemente mis mejillas con mis manos y salí de nuevo a esa sala de reuniones.

—¿lista? — con gran diferencia de que esta vez Haku me acompañaría a la reunión, no supe que responder… si sigue de esa manera este muchacho me terminara matando de un ataque al corazón.

—¿Sucede algo? ¿tienes fiebre? Estas roja— inmediatamente acerco su frente a la mía comprobando mi temperatura, y no, no tenia fiebre simplemente hoy Haku se ve… como decirlo sin que suene vulgar… más agradable a la vista de lo normal, viste un yukata negro adornado con rojo y una armadura resplandecientemente plateada con detalles dibujados en ella y su estilo de medio pecho con una hombrera que cubría esta con picos haciéndola parecer más imponente, la altura de Haku ya habla por si sola y la armadura aporta mucha presencia a la situación.

Yo el día de hoy opte por traer el cabello recogido y un adorno dorado en el cabello, los labios rojos junto a un poco de rímel en mis pestañas, un kimono dorado con detalles en blanco y flores rojas dibujadas en el, me apoye en Haku recuperando la distancia que nos dividía anteriormente.

—No es el caso, me siento bien y no tengo fiebre, son… los nervios— cruce mi brazo con el suyo y así nos encaminamos hasta la puerta, Haku toco la puerta tres veces avisando nuestra llegada, él entro primero corriendo el asiento en el que yo me sentaría, entre en la habitación detrás de él siendo lo más recatada y educada posible, observe a mi alrededor y todos los ojos estaban puestos en nosotros, al parecer éramos los últimos en llegar, habían varios monjes, sacerdotisas y dragones presentes, tome asiento y enseguida Kohaku tomo asiento a mi lado.

—Ya que estamos todos, demos por comenzada la reunión— todos asintieron de acuerdo

A los recién llegados a la villa les contaron exactamente lo mismo que me explicaron a mí ayer por la noche, Haku al igual que los demás no estaba al corriente de la situación así que él también se esforzaba por poner atención a la reunión, divise a las personas que me rodeaban y todos parecían agradables a simple vista, no podía percibir mucho poder espiritual de la mayoría pero como Ryujin-sama comento ayer hay dos personas en esta sala aparte de mi que tienen un poder espiritual similar al mío, podría decir que incluso hay uno que me supera.

—Ahora me complacería que Chihiro explicara cual es el plan que queremos ejecutar— escuchar mi nombre me saco de mis pensamientos dejándome en blanco por un momento, carraspee la garganta y respire hondo.

—Verán, según lo que ya les explicaron y de acuerdo a la información que tenemos en estos momentos nuestra prioridad es encontrar que esta originando este problema y cómo podemos solucionarlo, según las suposiciones se cree que es una persona como nosotros la que quiere romper el equilibrio, entre más rápido cubramos la zona de búsqueda seria mas rápido localizar el problema— voltee a ver a todas las persona que estaban a nuestro alrededor— Aquí es donde entran ustedes, nos dividiremos en tres escuadrones para recorrer diferentes zonas lejanas—

—¿Disculpe, pero usted que hará? — pregunto un muchacho castaño al igual que sus ojos, él era uno de las dos personas con las que tendría que compartir el campo de batalla en la peor situación.

El regreso de Chihiro  y la Villa de DragonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora