Criptonita 2da Temporada |Liam Payne| =editando=

18

Capítulo 18:
- ¿Señor Payne y señora?
- Si, ¿qué sucede? – preguntó Liam. Yo luchaba para poder escuchar.
- El señor Malik entró en un ataque de nervios y pide por ustedes. – Liam me miró. 
- Vamos para allá – dijo y colgó.
- ¿Qué pasó? – pregunté
- Es Zayn – se me paró el corazón – tuvo un ataque de nervios – suspiré, podría haber sido peor.
Entré a la habitación de mi hijo; dormía plácidamente. Le dejé una nota y me fui al hospital.
Una vez allí, buscamos la habitación y entramos.
- Amigo, ¿Cómo te sientes? – preguntó Liam.
Zayn estaba pálido y transpirando. Se notaba inquieto.
- Lo sedamos un poco, mencionaba mucho a un tal “X” – dijo el doctor y nos dejó solos.
- X – dijo Zayn y me acerqué a él mientras Liam contenía a Perrie.
- ____, es X, entró a esta sala – dijo y se me frenó el pulso.
- Zayn, estas delirando – dijo Liam.
- Calla, Liam – lo reté. - ¿Qué te dijo? – pregunté mirándolo atentamente.
- Dijo… dijo que estaba cerca – confesó preocupado.
- Zayn, tienes fiebre, ¿si? – dijo Liam – hablamos cuando estés mejor.
- ¡No estoy delirando Liam! 
- Quizá lo soñaste – añadió Perrie.
- No, no, él estaba aquí junto. Por favor, tienen que creerme. – imploró.
- Yo te creo, Zayn – dije tomando su mano – yo te creo.
- Gracias ___ - dijo – por favor, cuida de Nathan.
- Lo haré – dije y él asintió.
- Liam… - susurró Malik y miré a mi prometido.
Su cara… era seria pero parecía una cara harta de tanto nombrar a X.
- Deja de inventar, Zayn. _____, vamos.
Decidí hacerle caso, me despedí y volvimos a casa.
- ¿Cómo puedes tratar así a tu mejor amigo? – pregunté al llegar a casa.
- No quiero hablar más de este tema, ¿soy claro? – dijo y en verdad parecía enojado. Preferí cerrar la boca y asentir.
Liam se tiró pesadamente en el sillón, colocó sus manos detrás de su cabeza y cerró los ojos. Lo miré extraño.
- ¿Qué haces? – pregunté. Él abrió los ojos y me miró.
- Duermo, ¿no es obvio?
- ¿No dormirás conmigo? – pregunté desanimada.
- ¿No fuiste tú quien ayer dijo “puedes dormir en el sillón, Payne”? – preguntó imitando mi voz. Lo miré mal.
- No quiero que te enfermes, además, ayer estaba enojada.
- Bien, ¿quieres que duerma contigo? Duermo contigo, no tengo ganas de discutir. – dijo y fue directo a la habitación. 
Negué con la cabeza y fui a ver si Nath seguía dormido. Lo estaba, con una mano cubriendo su costilla rota. Aún no me explica lo que paso, lo viene evitando.
No te librarás, Nathan James Payne.
Me desperté y Liam no estaba a mi lado. Tranquila, está trabajando. Salí de mi habitación.
- Hola ma – saludó mi hijo – creí que estabas en el hospital con Zayn, ¿Qué paso?
- No, eso fue anoche.
- Ah, leí tarde la nota entonces, ¿no paso nada grave, verdad?
- No, solo le agarró un ataque de nervios.
- ¿Por?
- Dice que X lo visito a su sala y le dijo algo de que “está cerca”. – dije, con miedo.
- ¿Tú le crees?
- Me juró que no estaba mintiendo, es tu padre quien no le cree, dice que se lo imagina, que se golpeó muy fuerte o que lo soñó.
- Liam me aseguró que lo mató, ma.
- No Nath, tu padre le disparó y después de eso corrimos hacia un barco porque tu padre estaba herido, nunca lo vimos dejar de respirar. Pero tu padre está convencido de que el ya no vive.
- No creo que haya soportado ese disparo, digo, por su edad.- es tan igual a su padre.
- Sabes, X me dijo una vez “Los primeros hijos de los Payne siempre son hombres y son idénticos a sus padres”, tú eres igual a Liam. Me dio la misma excusa que tú me acabas de dar. – dije sonriendo.
- Yo creo que esa teoría no es cierta. 
- ¿Cómo sabes?
- Liam no es igual a X, ¿o si?
- Es una excepción – aseguré.
- No, no existen las excepciones. – lo miré extrañada. 
- No entiendo.
- Si uno no cumple con esa regla entonces esa regla o “teoría” no existe. No se aplica a todos.
- Puede que tengas razón hijo.
- ¿No la tuve alguna vez? – rió.
- ¿En pensar mal de tu padre?
- Bien, no soy inteligente, me has dado una excepción. Buen punto.
- A pesar de eso, lo eres – dije y besé su frente.
- Ma – me llamó.
- Dime – dije mientras me preparaba el desayuno.
- ¿Crees que Lucie pueda venir a cenar algún día? – preguntó y lo miré divertida.
- ¿Ya es tu novia? – lo miré pícara.
- No pero… lo estoy considerando.
- ¿Sabes si a ella le gustas?
- Tengo algunos indicios. 
- Genial, porque me agrada para ti. Es bonita.
- Si, lo sé – dijo sonriendo.
- Que venga cuando quiera – aseguré y le guiñé el ojo. Él rió.
Desayuné y me bañe. http://www.polyvore.com/cgi/set?id=88864216&.locale=es
- Nath, voy a comprar al supermercado, vuelvo para el almuerzo.
- Entendido – dijo y salí por la puerta.
Recorrí todo, compré todo lo que necesité y fui a la caja.
- ¿_____? – escuché que alguien me llamaba por detrás. Que no sea quien estoy pensando. Volteé.
- ¿Harry? – pregunté sorprendida. Si, era quien estaba pensando.
- Paso mucho tiempo, ¿Cómo has estado? – pregunté.
- Bien, ¿tu? – pregunté.
- Si, bien. ¿Qué tal Nathan?
- Con una costilla rota – dije.
- ¿Cómo? ¿Qué paso? 
- Una pelea y bueno.
- Es un tipo duro eh. ¿A quién me recuerda?