Fiebre en la mirada [Maca y Vero // Hospital Central]

Te Echo de Menos

De pasar un fin de semana largo con Claudia volví relajada. El destino había sido un spa, no podía haberlo escogido mejor. Yo necesitaba la tranquilidad que me brindaba el silencio, me hacían falta mimos y gritaba por salir de Madrid. Aunque quizás un turno de noche en el Central no era lo ideal para volver a la rutina.

Dejé sobre la mesa del gabinete la taza ya vacía del tercer café de la noche y me pasé las manos por la cara. Prefería un tiro en el estómago en ese momento. Todo el mundo parecía tener trabajo esa noche menos yo y me estaba aburriendo profundamente. Al final tendría que acabar haciendo informes.

Desbloqueé el móvil buscando algo con qué entretenerme. Miré la hora: las dos de la mañana. Con suerte Claudia todavía seguía despierta y me podía entretener la noche. No se había compadecido de mí y no había querido acompañarme en el turno, algo que yo siempre hacía con ella. Pero prefería no pensarlo.

Abrí el WhatsApp y le pregunté si estaba despierta todavía. Había sido un fin de semana relajado pero complicado a la vez. La excusa de que el ramo de flores me lo había regalado Rai parecía no haberla convencido del todo y había desarrollado una tendencia a observar todo lo que hacía con mi móvil a cada segundo. Por supuesto, no había hablado ni con Maca ni con nadie sospechoso, pero su recelo me molestaba. Habíamos discutido un par de veces durante el viaje romántico y aunque al final lo arreglábamos había acabado por no tener muchas ganas de pasar tiempo con ella; tendría que hacer un esfuerzo.

"Estaba a punto de dormir. Qué pasa?"

Suspiré. No me había dicho nada malo pero me ofendía su tono cortante, llevaba así varios días y yo no había hecho nada. Bueno, quizás no le había contado que Maca había estado en casa y había traído flores, pero si lo hacía se imagniaría más cosas de las que habían pasado. No me apetecía la conversación.

"Nada... solo me aburro y te echo de menos"

Suspiré y dejé el móvil sobre la mesa a la vez que los brazos, apoyando la cabeza en estos después. Si pensaba en todo lo que tenía que pensar iba a faltarme el aire de nuevo, así que mejor entretenerme con otras cosas. Miraba el móvil fijamente, esperando respuesta.

"Trabaja..."

Puse los ojos en blanco y solté un bufido. No era la respuesta que esperaba. Me quedé unos segundos sin saber qué contestar y después me mordí el labio. Había tenido una idea.

"Y por qué no me mandas una foto para animarme?"

Me reí para mis adentros. Me acabaría mandando una foto en pijama y no era precisamente lo que buscaba, pero también me valía.

Un mensaje nuevo.

Lo sabía. Puse los ojos en blanco. La verdad que era preciosa, para qué mentir. Pero mis hormonas estaban más revolucionadas de lo que pensaba y se habían decepcionado.