SINOPSIS
Tres rostros, iguales.
Pero tres personas, diferentes.
El ángel.
El demonio.
Y la balanza.
Los tres famosos hermanos gemelos, Mon.
Joviano, Denicio y Tesar.
O como bien se los conoce.
Por los hermanos Jo.De.Te.
Porque son, sexis.
Porque son...
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AURORA
Junto al último sorbo de mi taza y recuperada un cien por cien, me pongo de pie con la idea y observando por el inmenso ventanal, que ya es hora de mi partida.
Con algo de suerte y la condenada lluvia parando y convirtiéndose solo en algo molesto por ser poca, consiga algún taxi perdido.
Sip.
Decidida busco de mi carterita, pero me detengo.
Un momento.
Miro silloncitos y hasta el escritorio.
Porque, no la veo.
¿Dónde quedó?
Solo diviso mi par de zapatos que dejé en un rincón y fuera de la alfombra para no mojarla.
Pero, mi bolso en ninguna parte.
Como tampoco recuerdo y haciendo memoria, en que momento me lo saqué.
El sonido de la puerta abriéndose me hace mirar en esa dirección, viendo a Denicio saliendo.
Y aunque mantiene el pantalón de vestir, pese a la humedad.
Baba.
Ahora reemplaza a su camisa mojada, un bonito suéter liviano escote en V, que indica nada debajo de él, por la vista y parte de su cuello como pecho.
Uno tonificado y sin una camiseta debajo.
Mierda.
Eso es lindo.
Se los arremanga de un movimiento hasta la altura de su medio brazo, mientras camina al frigobar para sacar una botella de energizante.
Y arrugo mi ceño por la hora.
¿Eso, es bueno?
Bebe y me observa a través de ella y esperando una respuesta.
Supongo a mi mirada interrogante.
- Mi cartera. - Digo, volviendo a mirar todo lo que me rodea.
La cierra con su tapa, para dejarla sobre un mueble y responder.
- Mi coche.
Oh.
Algo nerviosa pero intentando disimular, entrelazo mis dedos frente a mí, cosa que falla, ya que sus ojos bajando a mis manos lo delata.
Rayos.
- No te preocupes, mandaré a alguien por ella... - Camina hasta su escritorio para buscar su celular.
Pero sacudo mi cabeza negando y caminando hacia mis zapatos y sin importar si están mojados, me los pongo.
- No hace...falta. - Digo algo ansiosa. - Iré yo, por ella...
