La vida no le podía haber dado mejor suerte: popularidad, travesuras sin límites y dos fieles compinches. Shaoran era ese tipo.
Una fiesta no planeada y, peor aún, la llegada repentina de sus padres esa noche, lo llevará a conocer a Sakura Kinomoto...
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POV. SHAORAN
Mi nombre es Li Shaoran y tengo 17 años de edad. Soy hijo de dos grandes empresario, sin embargo, voy en una escuela de un pequeño pueblo llamado Tomoeda, ubicado en Japón.
En estos momentos estoy en camino hacia la escuela. Soy el capitán del equipo de fútbol. Que haría un grupo sin su capitán. Soy el centro de ese grupo, el alma y color. Qué sería de mí si no me tuvieran, oh my god.
Cuando metí un pie en la escuela, todas las chicas de allí comenzaron a perseguirme. Corrí lo más rápido que pude, hasta lograr perderlas por completo.
— Vaya tu. Siempre huyendo — decía mi mejor amigo, Eriol Hirahizawa. Sub-líder en el equipo. Forma parte de mi grupo, perteneciendo al trío de los populares.
Junto a él estaba mi otro mejor amigo, Yamasaki. También amigo mío.
— No me queda de otra — me defendí — Salvar mi pellejo es deber mío, sino, ¿Quién lo haría? Dime.
— Tienes mucha suerte Shaoran — habló Yamasaki — Todas las chicas se mueren por ti. —bufó— Además. Eres hijo de empresarios. Riqueza por doquier. Dios. Te envidio, Li.
Correcto. Soy hijo de dos grandes empresarios.
Qué no podría desear. Rico, apuesto, afortunado con las chicas, capitán del equipo de fútbol, aunque no tan bien con las calificaciones, pero eso no importa.
Mi vida es.. simplemente es perfecta — pensé mientras acomodaba mi mochila.
— ¿Dijiste algo Shaoran? — preguntó Eriol mientras arqueaba ligeramente una ceja, haciéndome el centro de atención.
— No. — una sonrisa ladina en mi — Amigo.
Auch. Pensé en voz alta. Igual no es sorpresa. Mi vida es simplemente perfecta.
SAKURA
Mi nombre es Kinomoto Sakura y tengo 17 años de edad.
No es sorpresa decir que pertenezco al grupo de 'nerds' de la escuela
En estos momentos estoy poniendo unos afiches en el anotador de la escuela.
Estaba tan distraída, que no me di cuenta que un muchacho venía corriendo a toda velocidad hacia mi.
Sin querer nos chocamos, lo que ocasionó que todos los archivos cayeron al suelo.
— ¡Fíjate por donde vas, tonta! — dijo un muy molesto Li Shaoran, mientras estaba poniéndose de pie.
— ¡Tonto serás tú! — le respondí, el ignoró mi respuesta y siguió su camino, luego empecé a recoger todos los papeles del suelo.
