Bajó del auto tan rápido como pudo y entró al edificio atravesando la puerta corrediza sin siquiera cerrarla. Pasó de largo ignorando la recepción hasta llegar a las puertas de las oficinas de los doctores, entonces se detuvo abruptamente al no recordar cuál era la del doctor que atendía a BaekHyun.
—Ni siquiera sé el nombre. —Susurró con cansancio.
Con pesadez regresó a recepción y no le quedó de otra que preguntar por el castaño.
—¿Byun BaekHyun? —Repitió la mujer. —Un momento.
SeHun asintió y mientras tanto reguló su respiración. Recuperando el aire que había perdido en la carrera que se hechó desde el estacionamiento hasta el hospital.
Debe admitir que el susto que le dio al tocar infinitamente la puerta del chico no se comparó al que le dio cuando el jefe de BaekHyun en el restaurante le dijo dónde se encontraba. Eso sin contar la indignación que sintió al enterarse de que ese hombre sabía sobre su ingreso al hospital y él no.
Entendía sus palabras sobre el «No llevamos mucho de conocernos» Pero vamos, una amistad no necesita de años cuando la química se siente brotar.
—Aquí está —Interrumpió sus pensamientos la recepcionista. —El joven fue ingresado hace un par de horas. ¿Quién viene a verlo?
—Em, soy SeHun. Su amigo..
—Los horarios de visita son los fines de semana después del medio día hasta antes del anochecer para quienes no son familiares. Tendrás que venir hasta entonces.
—¡¿Pero qué...?! —Bajó la voz cuando la mujer le dio una mala mirada. Suspiró. —Escuche, soy su único familiar, al que nadie informó que lo habían ingresado. Quiero, no. Tengo que saber cómo está, que tan mal está.. en qué puedo ayudar y esas cosas. No puedo simplemente irme y volver en tres días. Eso es inhumano.
—Aquí dice que él tiene un familiar. Fue quien lo ingresó.
—¿Qué? No. ¿Quién?
—Eso es información confidencial querido, si es todo puedes retirarte.
SeHun cerró los ojos y volvió a suspirar. Se dio la vuelta hechando humo por las orejas y salió por la puerta rumbo al apartamento del chico, tenía que averiguar qué familiar tenía cerca como para haberlo ingresado.
—•—
—Aquí tienes cielo. —Le dió su pequeña maleta con sus pertenencias. —Cuando estés listo el doctor Kim te espera en su oficina.
BaekHyun observó como la enfermera le sonreía y se retiraba de lo que era ahora su habitación.
Se quedó ahí, de pie. Con las piernas temblándole un poco y los nervios a flor de piel. Mirando alrededor del cuarto dándose cuenta de que no había absolutamente nada más que una cama, un pequeño closet, un buró y un baño conjunto.
Suspiró.
Si se preguntan, BaekHyun ya estaba resignado.
Cabe mencionar que el castaño aun no entiende cómo se sintió amenazado al creer que lo podían obligar a ser internado. Ya estaba allí, pero no se explica cómo. Sin embargo, en todo el camino al hospital y el lapso de tiempo de espera para que lo instalaran en una de las habitaciones lo pusieron a pensar, y llegó a la conclusión (de nuevo) que quizás estando ya aquí pueda mejorar.
Y quien sabe, tal vez hasta sanar.
Eso no quita el hecho de que al ser todo nuevo para él no sabe qué hacer. Y peor aun, cómo actuar. Él no se considera loco, y para ser sinceros BaekHyun tiene un mal concepto sobre los psiquiátricos, y tiene miedo de que con el tiempo se convierta en uno. No obstante, pretende comportarse normal y solo seguir el procedimiento al pie de la letra, nada podría empeorar según él.
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Velvet Voice ||ChanBaek||
FanfictionCon una enfermedad peligrosa y recuerdos borrosos de un trauma que los creó, BaekHyun deberá poner todo de su parte para descubrir el propósito de cada personalidad que vive dentro de él. ||Una voz más allá de cualquier sentimiento, capaz de salvarl...