Capítulo 13

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Su rodilla se movía por instinto y sin ordenárselo constantemente de arriba a abajo en un obvio síntoma de nerviosismo y desesperación. Si no se comía las uñas era porque ya no habían uñas que comer. Se estaba volviendo loco.

-Disculpe, ¿podría preguntarle a la enfermera Byun si ahora sí puede verme? -Preguntó a la que lo atiende todos los días.

La chica suspiró y asintió, saliendo de detrás de su escritorio y caminar hacia la habitación siete a la que le habían prohibido acercarse por acosar tanto a la mujer. Sin embargo, no hizo falta que la fueran a buscar por décima vez en el día, pues por el pasillo que conectaba la habitación a la recepción ella venía caminando con pesadez y una cara de pocos amigos.

-Sígame. -Se limitó a decir, y claro, SeHun no lo pensó dos veces.

La siguió en un recorrido poco convencional por el hospital hasta las afueras de éste, no en la calle, pero tampoco adentro. Supuso que quería un poco de privacidad para decirle muy educadamente que la dejara en paz. Cuando se hicieron hacia un lado de la acera y el viento volaba sus cabellos dándole un aire similar a BaekHyun SeHun se quedó tenso, pero no desistió.

-Solo una vez, solo una vez le pido. A BaekHyun le haría muy bien.

La enfermera HaYoon lo miró detenidamente sin parpadear, escrutándolo con la mirada y leyendo sus más profundos secretos con tan solo penetrar de la manera más oscura sus ojos.

-¿Cuál es tu relación con LuHan?

La expresión en el rostro del pelinegro no solo le confirmó a la enfermera Byun que existía una relación, sino que ésta era más complicada de lo que un par de amigos poseía. Su rostro iba del blanco al rojo y sus ojos irradiaban una tristeza contenida por mucho tiempo y escondida debajo de una faceta de olvido. Aunado a un recuerdo que abrió una herida que no creía que sanaría pero que al menos no proporcionaba un dolor insistente. Tantas respuestas en una sola cara.

-Yo..

-He visto su registro de visitas. Que coincidencia ¿no? -Sonrió con sarcasmo -Dejaste de venir hace cinco meses, y de repente apareces rogando por una visita a mi hermano.

-No es tan simple como una relación de hermanos. -SeHun frunció el ceño.

-Una relación de hermanos no es simple, menos con una traición de por medio. -Musitó.

-BaekHyun no la traicionó.

-¿Por qué dejaste de venir? -Cambió de tema bruscamente. Con un tono mordaz que no se sentía ni con el menor derecho de utilizar pero creía que si el chico exigía una visita no consentida ella merecía respuestas por un paciente al que le cogió cariño aunque jamás lo ha visto con los ojos abiertos.

SeHun sin embargo no contestó, frunció los labios de una manera que le hizo entender a la mujer que se trataba sobre sus demonios internos, algo así como problemas de debate entre el cerebro y el corazón. Justo como le pasaba a ella ahora.

-Iré. -Volvió a hablar después de unos segundos esperando su respuesta -Iré y tomarás el ejemplo de que el amor puede más que el miedo a que el pasado consuma tu presente.

Y sin decir más ni esperar una respuesta comenzó a caminar rumbo al hospital otra vez. Dejando a SeHun con miles de contestaciones y de nuevo, sin el valor para pronunciar alguna.

-•-

-La primera vez.. tenia diez, recién superaba lo de mis padres. Aunque esa no es la palabra que usaría. -Hizo una pausa para tomar aire y acomodar las palabras en su cabeza para continuar con el relato. -Me quedé en el salón, como siempre. Pero esta vez, mi profesora había ido, supongo que por su desayuno o qué se yo. Entraron unos niños, jamás había sido problema para mi estar solo. -Se rió -Uno de ellos me pidió que lo acompañara a jugar porque le hacía falta un portero. Por supuesto me negué y de la manera más amable y normal según yo. -Tomó una bocanada de aire y exhaló ruidosamente. -El niño en aquella época me dio un.. zape? Si, un zape y me dijo que ni al caso, que de todas formas no quería jugar conmigo. -Se rió sarcásticamente -Ah, los niños en ese entonces.

Velvet Voice ||ChanBaek||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora