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Luis tenia la cara cubierta con sus manos, estaba muy avergonzado.

—Eso fue demasiado para mí—Dice Lucy sin dejar de reír.

—Ya, no te burles—Dijo Luis sin dejar de cubrirse la cara.

—No me estoy burlando, solo me río de lo vergonzoso que fue para ti por eso.

—Lo fue—Suspiro—, llegamos hasta ser buenos amigos, pero yo estaba loco por ella, me dejó, como lo dicen las chicos de ahora, en la Friend Zone, eso, porque estaba enamorado de otro, en el padre de Astrid, Anabell y Anie.

—Oh.

—Sí, le advertí que no estuviera con él, pero ella me dijo que lo amaba, se veía que estaba loca por él, y sabía como se sentía, y con mucho dolor, la dejé ir, pero luego de unos años, por cierto, apenas hablábamos muy poco—Dijo Luis, tomando una pausa para luego continuar—, llegó un momento en que no nos hablamos en un año debido a que mi papá me había dejado su empresa y estaba con la cabeza llena de cosas, que llegaba a casa agotado, retomando lo de Sophia. De repente, me llegó una llamada suya, me contó que su esposo la golpeó, mi esposa estaba muy celosa de Sophia, porque en vez de estar enamorada de ella, estaba enamorado de otra, Sophia me contó que llevaba años en eso pero no me lo contó porque tenia miedo a lo que pasaría pero luego se dijo que quería desahogarse, y que era el único quien la entendía.

—¿Y qué pasó?

—Le dije que lo demandara, y lo hizo, la ayudé, a larga distancia, luego, decidí hacer una empresa aquí, y luego me reencontré con ella, bueno, no exactamente.

Luis se volvió a sonrojar.

—Dimeeee—Intrigada.

—Bueno, cuando toque la puerta de su casa, me atendió Astrid, en ese momento me estaba muriendo por orinar. Le dije que venía a ver a su mamá, ella dijo que salió, pero que volvería pronto, le dije que era un amigo, le dije mi nombre y ella me dijo que estaba encantada de conocerme, que su mamá contó cosas muy lindas de mí, me sentí bien en ese momento, le dije que dónde estaba en el baño, ella me guió y entré al baño. Pero en ese momento. Me llamaron, atendí la llamada en el baño y cuando por fin me desocupe, empecé con lo mío, cuando casi terminaba alguien abrió la puerta y era Sophia.

—¡No puede ser!—Lucy ríe a carcajadas.

—Por suerte estaba dándole la espalda, Me dijo "¡¿Por qué cuando vamos a encontrarnos siempre estás orinando?!"

—Yo haría la misma pregunta—Dijo Lucy.

—Y pasó algo peor.

—¿Qué pasó?

—Te vas a morir de la risa, yo lo sé.

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Intrigaaaaaaa wuajajajajajjajajaja. Lo sé, soy bien Cruel ;v

Nos vemos mañana :3

Lxs amo ♥

–Merys G.

¡Hola Consuegro! | Libro 5Donde viven las historias. Descúbrelo ahora