CAPÍTULO 1

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-A-... ¡Ahh!

- ¡Corte!

...

-¡Ue-chan! ¿Por qué?

- ¡Ya se corrieron tres veces seguidas! El video no puede durar tanto.

- Mmm...Yuu-san.

-Ya lo sé.

El pelinegro cargo a un cansado Takanori, mientras que un furioso Kouyou discutía con su mejor amigo.

-¡Idiota! ¡Lo mejor estaba por venir!

-¿no ves lo exhausto que esta? ¡El no resistía más!

- ¿Qué? El lindo Taka soportaría mucho mas, pero ustedes tres ¡JA! No pueden, mira a Yutaka, no puede ni levantarse de lo dura que la tiene.

- Y-Yo no diría eso.

- Yuta cállate, Shima...aunque tengas razón, si das todo de ti ahora, no quedara nada para el próximo video.

- Si, busca una mejor excusa, iré a descansar.

El joven castaño se retiro a su habitación, mientras que Reita y Kai se quedaron pensantes en el cuarto de grabación.

- Iré a editar este video, si es que no tardo más.

- Kai, claro que tardaras, ve a tu casa, iré a ver a Takanori.

Claramente los dos debían descargarse esa tensión que sus pollas sentían, pero lo haría a su modo. Ambos se despidieron y cada uno fue por su camino, tal como dijo el rubio, fue a ver al menor de los cinco, el cual ya se encontraba durmiendo, cubierto por varias mantas y en compañía de su mejor amigo, Aoi.

- ¿Cómo esta?
- Cansado, ahora solo duerme como un niño ¿Y Shima?
- Se fue a su cuarto... ese tonto no se complace nunca.
- Ya sabes el porqué, Kouyou es activo de naturaleza, pero hace tiempo tiene la fantasía de ser tomado por alguien más, pero no encontramos a esa persona.
- Si eso ocurriese, todos los espectadores y patrocinadores le amarían más, así como lo ama la cámara.
- De la misma forma en que tú lo envidias

El rubio solo desvió la mirada, hace tanto tiempo que deseaba tomar el cuerpo de su mejor amigo, un cuerpo que le hacía delirar con cada posición que mostraba ante la cámara, cámara que el manejaba. Claro que ni imaginaba que lo que sería el pago por una guitarra se convertiría en una forma de vida, si, su mejor amigo era un actor porno.

Pero en cierto modo, el pelinegro tenía razón, odiaba ser quien manejara esa maldita cámara, ser el quién estaba detrás de esa maldita cosa y captar cada gemido, cada movimiento, cada suceso en el cual el castaño se corriera, sea tanto dentro de Ruki como en su propia mano.

Quizás ya eran tres años soportando las ganas de lanzar todo a la mierda y sodomizar a ese estúpido y caliente hombre, el cual le obligaba de cierto modo a masturbarse por el luego de cada sesión que realizaban y eso, no era algo muy sano.

Observo por un momento al pelinegro, el también sentía cierto apego por su mejor amigo y claramente luego de los videos denominados "Uruki" cada quien regresaba a su hogar luego para nuevamente hacerlo en una semana. El convenio con la productora era un video por semana, claramente que este de dividía en tres partes, para ser vendidos tanto en tiendas para adultos u online.

-El próximo será en vivo ¿Cierto?

-Sí, pero creo que Ruki no participara mucho, no por ahora.

-Mejor así, el solo es mío.

Y llego el momento incomodo que siempre vivía frente a esos. A pesar de que ambos se llamaban mejores amigos, hace tiempo que dejaron de serlo. Como si poco le importara que estuviera dormido o agotado tras una sesión de sexo, Aoi despojo al rubio claro de sus mantas, enserio que no tenia vergüenza y su libido aumentaba al tener espectadores.

-Reita, si no quieres ver lo que hare mejor vete y ve con Uruha, seguro te ayudara con tu problemita.

-No seas idiota.

Y antes de presenciar la follada que sufriría Ruki se fue de la habitación, claro que ni loco estaría allí, demasiado había tenido mientras grababa antes y que su entrepierna doliera aun como los mil demonios. Aun con ese dolor y haber discutido como siempre lo dejaba de lado, fue a ver a su viejo amigo.

-Shima ¿puedes abrir?

Solo escuchaba pasos apresurados y una que otra cosa cayéndose. Hasta que al final el castaño abrió la puerta. Vaya sorpresa había ligado Reita.

MI MEJOR AMIGO, UN ACTOR PORNODonde viven las historias. Descúbrelo ahora