MI MEJOR AMIGO, UN ACTOR PORNO

CAPITULO 13

Al regresar al cuarto de Uruha noto que la puerta estaba trabada por dentro, era imposible que Uruha estuviera despierto porque apenas de dormia costaba al menos cinco horas de ruido molesto para despertarlo, Kai no regresaria ni por todo el dinero del mundo.

Reita, Aoi y la gran puta madre. Dejo la comida en el sofa y busco nuevamente el latigo, claramente no pudo llegar ya que dos brazos se lo impidieron.

-Mi Ruru hermoso~

-¿Yuu? ¡¿Que haces aqui?! ¡¿No debias trabajar?!

Varios besos fue los que el pelinegro dejo en el cuello del rubio sonriendo, sabia por anticipado de lo enojado que estaba pero molestarlo asi le encantaba mucho.

-Desinfectan el edificio, asi que decidi quedarme a darte mimitos.

-¿Y la Iguana se quedo con Kou?

-Claro que si, es su novio~

Aunque no deseaba fue arrastrado por su pareja pelinegra hasta el cuarto que compartían despues de las grabaciones. Algo que ya sabia de memoria y que Ruki siempre le repetia: "Se mas atento conmigo negro".

Quitando lo racista y mal hablado que era su novio, tenia cierto grado de razón, bueno ambos terminaban dormidos o agotados, entre el trabajo de ambos y horarios, ninguno podia quedarse en casa del otro, mas que compartir unas horas en casa del pato.

Termino en la cama con el rubio sentado en sus piernas, acariciandole el cabello con mimo.

- ¿Que tramas Yuu Shiroyama?

- Muchas cosas, Takanori Matsumoto.

Lentamente quito la bata, acariciando su espalda y cintura con cariño, dejando pequeños besos en su cuello y hombro. Ya tenia en claro los puntos débiles del rubio y como amaba ser mimado así, tampoco negaba que adoraba hacerlo, recorrer el cuerpo de novio con los labios y manos era toda una maravilla.

Ruki adoraba ser consentido de esa forma, se sentia más deseado de esta manera y tampoco dejaba sin cariños al pelinegro, acariciar su ancha espalda y hombros, su azabache melena y repartir un par de besos en su cuello y rostro, extrañaba estar asi, cambiar esto por sus noches salvajes y descontroladas no era la idea, solo queria incorporar todo esto seria algo deseado.

-Yuu~ te amo tanto, mi Yuu.

-Mi Taka~ completamente mio, te amo mucho~.

Las caricias volvian calientes a ambos, mas y mas calientes. Besos mas profundos, caricias en sus miembros y una que otra palabra sucia, solo los encendia mas y mas, un nuevo dia con lujuria daba inicio para este par de amantes.

El rubio termino bajo el cuerpo de Aoi, caricias en sus muslos y gluteos, besos en su pecho y pezones. Gemidos y jadeos, el miembro del mayor entre sus gluteos, el liquido preseminal lubricando su entrada y su miembro empapado de su propio liquido, excitarse de esta forma era tan vergonzoso pero especial que su corazon latía tan fuerte. Amor, todo era amor por su pareja.

Para Aoi, Ruki era lo mas precioso del mundo y poco le importaba que comentarán que salía con alguien menor e incluso siendo hombre, amaba demasiado a ese rubio, amaba consentirlo, mimarlo y sobre todo hacerle el amor como tanto deseaba.

-Rapido... tardas demasiado.

Sonrio, las sonrojadas mejillas del rubio era una de las mas hermosas vistas que podia tener. La vergüenza que este demostraba por hacer todo lentamente y siento tan cariñosos y sinceros, lo dejaba más indefenso de lo normal.

- Mi bello Ruu~

Besos en sus muslos y pelvis, sobre su miembro, recorrer su falo y glande con la lengua, escuchar su nombre entre gemidos del menor solo le alentaba a seguir, engullir su miembro por completo le dio como respuesta un gemido alto por la sorpresa por parte del menor.

-Aah~ no Yuu~

Continuo, succionando con fuerza y comenzando un vaivén lento con su cabeza sin que su boca dejara de complacer al menor. Jalones en su cabello y una que otra patada recibía por parte del menor, pero muchos mas gemidos que antes.

- Me estas...matando Yuu~ te necesito dentro~

Algo que claramente, Shiroyama Aoi no negaria a su amado Ru-Ru.