¿Escuela para homosexuales?©

Capítulo 3 ~discoteca gay~

                   Melodi

El sábado había llegado, la semana había sido completamente aburrida. Ya tenía todo arreglado y un plan planeado, sólo esperaba que todo salga bien.

-Melodi, come-me dijo mi papá desviando la mirada de su computadora.

Todos estábamos en la mesa comiendo, trataba de terminar lo antes posible para irme a arreglar. Mi papá estaba con su computador en la mesa "trabajando" y mi mamá comiendo con la vista perdida. Desde aquella ves que mi padre llegó ebrio a la casa ellos estaba algo más distanciados, recuerdo que cuando el se levantó al otro día tenía una resaca impresionante y no recordaba nada, o eso parecía. Mi madre no le había dicho nada de la pelea y yo tampoco, así que todo había quedado así.

Al terminar de comer me levante de la mesa.

-¿donde vas?-pregunto mi papa sin despegar la vista de la computadora.

-a mi cuarto, voy a dormir, asta mañana-los salude a los dos.

-asta mañana-respondió mi mamá.

Mi padre no respondió, como siempre.

Subí a mi habitación y entre al baño. Cuando salí del baño agarre la ropa que me pondría. Luego de estar casi toda la tarde tratando de elegir algo para ponerme había decidido por un vestido azul que convienen con mis ojos, me llegaba un poco de las rodillas y se ajustaba a mi cuerpo marcando mi silueta. En los pies tenía unos tacones negros de aguja, los cuales me los pondría cuando salga porque sino haria mucho ruido. Mi pelo castaño lo dejaría lacio y con pequeñas ondas al final. Y mis ojos los deliñe haciendo que parezcan más grandes, a mis labios les pase un labial de brillo y puse un poco de rubor en las mejillas, pero muy poco. Me mire al espejo, me gustaba mi imagen. Eran las diez menos diez. Me acerqué al pasillo, las luces estaban apagadas y no habían ruidos de mis padres, seguro estaban durmiendo. Salí descalza y de puntitas de pies. Llegue a la puerta principal, la abrí con mi llave y salí. Del otro lado me puse mis tacones. Afuera hacia frío, pero no volvería por una chaqueta. Me había costado llegar asta acá. Camine hacia la esquina. Antes de llegar me llegó una llamada. Era Máx.

-Hola Melo-dijo-ya estoy en la esquina.

-estoy ahí.

-ya te llevó-colgó.

Me acerqué a él y besé su mejilla.

-hola, llenas mucho tiempo esperando?-pregunte.

-hola, linda, no te preocupes-dijo-ven sube-me abrió la puerta, yo entre y luego el rodeo el auto para entrar en el lugar del copiloto-estas muy bonita, no pretendas que no llamaras la atención-me dijo. Yo me ruborise.

-em...gracias, supongo. Y creo que podré con lo que se me venga.

-cualquier cosa me pides ayuda, o a Dani o a cualquiera de los chicos.

-ya se.

El prendió la radio. Una música de voces femeninas empezó a sonar.

-quienes cantan?-pregunte.

-son Little Mix, para que te las vallas aprendiendo-dijo

-oh..eh olvidado completamente que me tengo que saber las canciones.

-me doy cuenta-me dijo.

La conversación quedó ahí, las canciones de esta banda femenina hizo que el ambiente no sea incómodo. Creo que ya estábamos por llegar. La música resonaba desde afuera, era una música pop. En la puerta habían gente haciendo fila, la mayoría de los hombres con camisetas con flores y pantalones ajustados y las mujeres con remeras olgadas y pantalones caídos. Muy pocos estaban vestidos como yo, o como Máx, el parecía más un heterosexual que un homosexual. Pero cuando hablaba podías notar que era gay. El aparco el auto en el estacionamiento del establecimiento. Los dos bajamos.