Across the Ocean

Capítulo 15 - Rosa y Azul

A los siete meses de embarazo se estaba volviendo un poco difícil el moverse papa Mark. Su vientre, para el placer de Jackson, sobresalía grande y redondo frente a él dondequiera que iba. Bambam y Jin le habían comprado tanta ropa de maternidad que era frustrante pa él. Ahora, a mediados de junio, hacía un calor de los mil demonios y había tenido que recurrir a las livianas sudaderas y shorts anchos que era la única cosa que podía satisfacer a un embarazado Mark. Se aseguró que los shorts tuvieran talle elástico también.

Para el gran disfrute del rubio, y la vergüenza de Jackson, habían descubierto que llevaba embarazado dos meses cuando se habían enterado. El doctor pareció pensar que fue un bebé de luna de miel, Mark, sin embargo, no paraba de molestar a Jackson.

- ¿Sabes lo que esto significa? - le preguntó pícaramente mientras dejaban la oficina del doctor. Los padres de Mark se habían ido a casa la semana anterior, y los de Jackson estaban esperando oír las noticias; se rieron, y pusieron sus ojos en blanco hacia su hijo, Tuan estaba seguro que pensaban lo mismo que él.

- Lo que significa - dijo casi inexpresivo mientras mantenía la puerta del carro abierta para el rubio.

- Esto significa que me dejaste embarazado en algún momento de diciembre. - Mark se rió entre dientes. Las mejillas de Jackson se estaban volviendo más rojas cada vez que le hablaba. - Eso significa que debes haber estado muy feliz de verme, ya que sólo te mudaste aquí en diciembre. - Jackson suspiró y sacudió la cabeza, pero el rubio podía verlo riéndose. Tenía que encontrarlo al menos un poquito divertido. Una pequeña sonrisa se formó en sus labios y Mark giró con una grandísima sonrisa hacia la ventana.

Por supuesto, esa vez Jackson le enseñó una lección cuando llegaron a casa. Básicamente saltó sobre él en la entrada, y el rubio no hizo ningún movimiento para detenerlo. Probando su punto de que probablemente Tuan era el más ninfómano en su relación.

De regreso al presente, Mark se había sentado con Bambam y Jin en la playa en frente de su casa, absorbiendo el bello día de verano antes de ir a su almacén favorito mientras esperaban que Yugy trajera a los otros dos chicos del trabajo.

- ¡Mira tan lindos que son estos ositos! - Bambam y Jin dijeron al unísono, sosteniendo pijamas de tres meses. Mark hizo 'Ahhh' con ellos antes de girarse hacia las cosas que tenían color: biberones, baberos, cobertores, varios juguetes de baño, juguetes en general. No podía superar cuán lindas eran las cosas de adultos hechas en miniatura, como las medias. Esas habían sido su cosa favorita para comprar, medias. Habían comprado un par de mamelucos neutrales divinos, algunos sombreros y, Bambam y Jin, no habían parado con los regalos.

El baby shower había sido hace una semana, y los amigos de la pareja se habían presentado con una gigantesca cuna, una mesa para cambiar los pañales, una pequeña y linda cajonera y otras cosas decorativas para el cuarto del bebé. Mark casi había estallado en lágrimas. Jackson estaba enojado porque había más rosa que azul.

- Hola, querido - susurró de modo tonto en el oído del rubio mientras envolvía sus brazos alrededor de él sosteniendo su vientre el cual pateaba bajo su toque. Sonrió como loco cuando eso pasó, siempre estaba tan emocionado sabiendo que allí había una pequeña personita dentro. Mark le dijo que era un poquito escalofriante cuando lo ponía de esa forma y que no pensaría eso en un par de meses. Terminaron de cargar algunas cosas más en la canasta y Jackson prontamente se la quitó al rubio de las manos para cargarla.

Bambam fue corriendo hasta Mark sosteniendo un paquete de medias que eran tan chiquititas y lindas que no podía para de reirse. Él tenía cinco meses de embarazo, su vientre ya estaba empezando a notarse de una manera hermosa. Jin era el único que se veía como si no hubiera metido un balón bajo su camisa, pero sabía que JB había estado cargando un anillo de compromiso por un rato. Bambam insistió que Yugy comprara las medias y un diminuto par de zapatos para que él gritara por los cuatro meses que le faltaban.