La Maldición De Ares

16. Allison.

Navidad estaba cerca y mi madre me había suplicado para que comprara un árbol sintético y demás adornos. Caminamos por el centro comercial durante varias horas, reí al verla emocionada por cosas simples.

-Mamá! -dije luego de al menos cuatro horas de compras- hora de comer algo.

Ella hizo un puchero y reí.

-Luego de comer continuamos con las compras, lo prometo.

Ella sonrió y fuimos a comprar  algo para comer y descansamos por un tiempo. Mi madre irradiaba felicidad, yo sonreía para ella aunque en realidad seguía algo triste por no tener a Katherine conmigo. 

Mi madre quien me conocía tan bien como la palma de su mano, noto la tristeza y dijo:

-Deja de pensar en ella, no es bueno para ti, te puedes enfermar. 

Reí un poco y asentí. Sabia que mi madre tenia razón, pero me era imposible... Afrodita misma nos había unido. Terminamos las compras y navidad llego, luego de unos días decidí darle la oportunidad al romance, no puedo decir que al amor ya que nunca sentí amor por ninguna de ellas. 

La mayoría de ellas tenia alguna similitud con Kara sin querer buscaba chicas pelirrojas, de ojos verdes o de ojos grandes. Esto lo comprendí un tiempo después.

Un día mientras salía del trabajo me tropecé con una chica semi pelirroja y de ojos marrones.

-Lo siento. -dije después de comprender que no era Katherine.

-Jonathan? -preguntó la chica.

Quedé algo sorprendido al inicio luego la reconocí, ella era Allison Miller, la había conocido en el Campamento Mestizo tiempo atrás, casi cuarenta años atrás.

-Allison?

Ella sonrió y asintió.

-Si, soy yo... -dijo ella sonriendo.

Era hermosa, principalmente por que era hija de Afrodita.

-Te vez mucho mejor! -dijo ella.

-Gracias... -dije suavemente. -Tu te vez muy hermosa, también. -dije luego de un tiempo.

Ella rió un poco y añadió:

-Gracias... Creo... Posiblemente es la magia de mi madre haciendo efecto.... Iba a tomarme un café, ¿Me acompañas?

Lo medité por unos segundos y acepte ir, de todas formas no tenía mucho que hacer en mi apartamento.

Bebí el café tranquilamente con Allison, ella no paraba de mirarme y sonreirme, me sentía algo incómodo y pregunté:

-¿Qué ocurre? ¿Tengo algo en la frente? ¿O en los ojos?

Ella apartó su vista sumamente apenada y negó, se quedó en total silencio y añadido:

-No, es sólo que... -Ella se quedó en silencio de nuevo, luego añadió- lo que ocurre es que... Deseo saber si recuperaste tu mortalidad.

Debo ser sincero quede algo sorprendido y anonadado.

-Yo... Heee... Si, si la recuperé hace unos meses.

-Wow -dijo sorprendida- eso es maravilloso.

-Gracias.

-¿Puedo saber cómo la conseguiste?

Medité unos segundos y luego inicie.

-La resurrección de mi amada Kara me ayudó, junto a ella derrote a mi padre y hermanos.

-Vaya... Eso es... Tan... Romántico. -dijo ella al borde de las lágrimas. -¿Supongo están juntos?

-No, ella estaba comprometida, debe estar casada ya.

-Lo siento... Yo no tenía idea. -dijo ella con los ojos llorosos.

-No hay ningún problema... Quizá tu madre no nos unió después de todo- dije tranquilamente.

Ella sonrió y dijo:

-Mi madre nunca se equivoca al unir dos personas y no lo digo solo porque sea mi madre. 

Baje la mirada algo avergonzado y asentí.

-Tienes razón, lo siento.

-No hay ningún problema, a mi me da igual. ¿Que te parece si salimos a  beber mañana, siento que debes despejarte?

-Bien.-dije sin dudar.

-Bien.-dijo ella sonriendo.

Al día siguiente puntualmente estaba en el bar que Allison me había dicho, la vi llegar con un bello vestido pegado a su cuerpo, no pude evitar deleitarme y tener pensamientos perversos, sacudí mi cabeza quitando de mi mente esos pensamientos. 

Allison me saludo dándome un beso en la mejilla y abrazándome, ella sonrió y yo con ella. Entramos al bar que era también una especie de discoteca, hablamos, bailamos y después bebimos hasta estar ebrios. Ella reía y yo con ella, el recuerdo de todo lo que sucedió esa noche es algo borroso.

En algún momento de la noche un taxi nos fue a dejar a mi apartamento, estábamos muy ebrios y no quería que le pasara algo malo a Allison, entramos al edificio en medio de risas, yo intentaba callar a Allison, pero hacia mas ruido callándola, al llegar al pasillo de mi apartamento, ella tropezó, la ayude a ponerse en pie. Mire a Allison, ella me veía fijamente mientras la ayudaba a ponerse en pie.  

-Creo que estoy muy ebria. -dijo ella.

-Si, bien, ya que, yo también lo estoy y tu no recuerdas la dirección de tu apartamento creo que lo ideal es que pases la noche aquí, en mi apartamento.

-Me quieres llevar a la cama?

Abrí la puerta y mire a Allison confundido.

-Estoy bromeando, dame la mano y llévame al sofá, quiero dormir.

Al tratar de entrar con ella tambaleamos juntos, de verdad mi mortalidad se había puesto a prueba al tomar de tal manera. Lleve a Allison a mi cama la recosté, tome sus tacones y los tire al suelo. Ella parecía inconsciente, fui a mi closet y busque otra camisa para dormir.

Me quite la camisa y sentí unas manos frías en mi espalda. Me voltee y vi a Katherine , ella sonrió levemente y yo no lo pensé dos veces, la bese. Tome su rostro con mis manos y la bese apasionadamente. 

Camine a la cama con ella y nos desvestimos, a pesar de mi deseo algo no estaba bien, seguro era mi ebriedad, yo solo deseaba tener a Kara en mis brazos.