Memories. 🥀 [Namjin]

Un recuerdo...

Cuando abrió los ojos la tenue luz de la lámpara que se encontraba a un lado de su cama lo cegó levemente, se sentó sobre la misma mirando como Hoseok salía corriendo de la habitación gritando "Señora Kim, Jin a despertado", arrugo la nariz mientras veía entrar a su madre y está se sentaba frente el en seguida besando repetidas veces sus mejillas y lo abrazaba con fuerza.

—No sabes lo preocupada que estaba, tuve miedo de que haya pasado algo peor —No la culpaba, desde lo qué pasó ella se había vuelto un poco más sobre protectora con el... oh bueno, eso era lo que pensaba puesto que realmente tenía muy pocos recuerdos.

—Tranquila, ya estoy bien... —Sonrió levemente y miro al chico de hebras naranjas —¿Donde está el chico ese?... ¿Como es que se llamaba?, ¿Ramón? —Pregunto algo confundido mientras ladeaba un poco el rostro

—Namjoon —Lo corrigió Hoseok evitando reír debido al nombre que antes había mencionado el rubio, en cuanto sintió la mirada penetrante de la señora kim la sonrisa de Hoseok se borro por completo luego ambos salieron de la habitación con la excusa que se plantó la madre de Jin; "Necesito aclarar algunos asuntos con tu amigo, cariño", fue lo que dijo antes de salir con el chico.

Sentado en el enorme sofá de piel Hoseok esperaba lo peor, los padres de Jin nunca estuvieron de acuerdo con la relación de su hijo... además de que siendo ellos tan conservadores jamás aceptaron el hecho de que su primogénito fuera homosexual, era antinatural según ellos. Pero no eran más que estupideces... no hicieron nada malo, solo amarse de una manera pura e inmensa.

—Seré clara —Dijo la mujer mayor mientras se sentaba frente al chico y le pasaba la taza de café que había preparado para el —No quiero que por ningún motivo vuelvas a juntar a mi hijo con ese muchacho, ¿Entendido?. Tú sabes mejor que nadie los motivos.

—Lo entiendo, pero Namjoon merece saber la verdad. Usted no sabe cuánto ha sufrido desde que Jin se fue, obligado por usted y su marido —Dio un sorbo a la taza mostrándose bastante neutral —De una vez le informó que yo simple y sencillamente estoy a favor del amor y su hijo merece ser feliz.

Ni siquiera termino el café, simplemente se puso de pie y camino hasta la puerta la cual cruzo dejando, de forma grosera, con la palabra en la boca a la mamá de su amigo. Después tendría tiempo de pedirle disculpas a Seokjin por irse sin despedirse.

[...]

A la mañana siguiente el chico de cabellos rubios salió de su casa, disfrutaba de salir al parque por un helado, pero ese día algo le hizo cambiar de dirección hasta la biblioteca en la cual entró mirando con curiosidad los cientos y cientos de libros que a su alrededor se encontraban. De pronto una cabellera azabache llamo su atención, el moreno tenía en sus manos un libro y los audífonos puestos.

Se sentó a su lado y le quitó uno de los audífonos.

—Hola, me gustaría charlar contigo —Sonrió amablemente sin embargo el moreno se mostraba indiferente

—Pero a mi contigo no —Le quitó el audífono de su mano

Y en ese momento, con el simple roce de la yema de sus dedos sobre su mano un pequeño flashback llego a la cabeza de Seokjin... la primera vez que había visto a Kim Namjoon.