Taehyung jugueteaba y charlaba animadamente con Hoseok mientras Jin y Namjoon caminaban detrás de ellos sumidos en un silencio sumamente incomodo, realmente el rubio no sabía qué decir y el moreno parecía que prefería el silencio a tener que entablar una conversación.
Sin avisarle a nadie Seokjin se detuvo frente al puesto donde vendían algodón se azúcar y pidió uno. Cuando el vendedor se lo entregó el extendió su mano dispuesto a pagar sin embargo alguien más se le adelantó lo cual le hizo fruncir el ceño y girarse para ver quién era.
—Me lo agradeces después —Fue lo único que dijo el moreno antes de seguir caminando sin siquiera mirar a Jin así que este comenzó a caminar detrás suyo
—No te voy a agradecer por algo que no te pedí —Por fin lo alcanzó así que comenzó a andar a un lado suyo —¿Por qué haces esto?, es decir... ayer cuando aceptaste ayudarme parecía que también te emocionaba un poco la idea y hoy simplemente pareces evitarme a toda costa.
—No hoy mucho que explicar realmente, aún estoy tratando de asimilar todo lo que ha pasado —Se sento en una banca que quedaba justo enfrente de un puesto de dardos en donde Hoseok y Taehyung estaban jugando intentando ganar un peluche. Seokjin se sentó a su lado. —El día que terminamos me quede con la idea que solo había sido un juego para ti, te fuiste y no supe nada más de ti durante un año... el volver a verte me removió muchos recuerdos y de pronto Hoseok me dice que nada fue como yo lo creí. Me estoy volviendo loco con todo esto
En ese momento Jin recordó la reacción de su madre cuando menciono a Namjoon la otra vez, ¿Tendría ella algo que ver con lo que ocurrió en el pasado?. Sin duda alguna esa era otra pregunta a la que le buscaría respuesta.
—Supongo que si Hoseok no te ha contado la verdad es que porque espera que sea yo quien lo haga... digo, a fin de cuentas todo esto gira entorno a nosotros —El rubio no se había dado cuenta pero debido a la pintura del algodón de azúcar sus labios tenían un leve tono rosado. —Por eso necesito esforzarme un poco más en recordar todo
—Tampoco te esfuerces de más, la última vez casi me muero del susto cuando te desmayaste —Pero no mencionó que después de que Hoseok se lo llevara a su casa el lo llamo como diez veces preguntándole como estaba Seokjin. —Yo de verdad lamento mi actitud
—Supongo que no tienes la culpa... —Encogió los hombros conectando su mirada con la del adverso, este sonrío divertido y el no entendió que estaba pasando hasta que sintió el pulgar del moreno limpiarle la comisura de los labios de una manera tierna y lenta
—Siempre comes como bebé —Se burlo. Por impulso comenzó a acercarse con lentitud, Seokjin parecía estar atónito y para nada se quitaba... y cuando sus labios estaban a solamente unos milímetros de distancia...
—¡JIN HYUNG! ¡NAMJOON HYUNG! —Taehyung se acercaba corriendo a ellos mientras entre sus brazos descansaba un adorable peluche en forma de oso. —Hobbie lo a ganado para mí, ¿No es genial?
Los mencionados se separaron bastante sobresaltados y miraron el peluche que presumía el menor, sonrieron a la par que Jin intentaba ocultar el sonrojo en sus mejillas.
—Es muy lindo TaeTae —Sonrió en dirección al castaño —Hoseok... ¿Debo empezar a celar a mi primo? —Jin cruzo los brazos y miro a su amigo con una expresión serie solamente para verse un poco "malo".
—¿Que?, no... claro que no —Negó varias veces, el solamente veía al chico como un hermano pequeño y no tenía ninguna otra intención con el. Taehyung no pudo evitar hacer una leve mueca, mostrándose bastante desilusionado vaya a saber el por qué.
—Bueno, pero venimos aquí a divertirnos así que vamos a ello —El Moreno se puso de pie y tomo a Jin de la mano causando que un cosquilleo recorriera la piel del mayor y su corazón latiera a prisa mientras trataba de seguirle el paso a Namjoon.
Sin mentir los chicos se habían subido a cada uno de los juegos excepto a los infantiles simplemente porque les dijeron que ya no tenían ni la estatura ni la edad para esas cosas... Jin recordó algunos momentos en ese lugar, cuando de pequeño iba junto a su primo favorito y comían palomitas y algodón de azúcar hasta que ya no podían más. Cuando tenía quizás unos 12 años conoció a Hoseok y este se convirtió en su mejor amigo y por ende el tenía contacto con Taehyung así que pronto los tres fueron inseparables y Hoseok se unió a las aventuras de los primos Kim.
Mientras estaban en la casa del terror los acompañantes de Seokjin no podían evitar burlarse de él puesto que era demasiado sencillo asustarlo y ante la más mínima cosa sus gritos se hacían escuchar en el lugar. No fue hasta sintió unos fuertes brazos rodearlo y ese aroma tan característico de Namjoon cerca suyo que pudo sentirse seguro, terminó el recorrido y rápidamente el moreno lo soltó haciendo como si nada hubiera pasado.
Y Seokjin recordó su primera cita con Nam, este había ganado una alcancia en uno de los juegos del parque y se la regalo... ahora recordaba porque guardaba con tanto cariño esa cajita
de la cual se asomaba un gatito y "robaba" sus monedas.Recordaba que se lleva muy bien con Nam, que conversaban de cualquier cosa de forma cómoda... parecía que eran cómplices de toda la vida.
—Oye Joonie —Murmuró Jin muy bajito, también se recordó así mismo llamando a Namjoon de esa manera, el moreno lo escucho y se giró para poder mirarlo —Quiero ir a la rueda de la fortuna, tengo un buen presentimiento...
El chico accedió y subieron a dicha atracción pero en cuanto estaban subiendo Seokjin comenzó a mostrarse nervioso y evitaba mirar hacia abajo.
—Dame la mano, no te pasará nada... —El pelinegro extendió su mano y espero unos segundos —Lo prometo —Seokjin accedió y le dio la mano entrelazando sus dedos. Parecía que ambas manos habían sido hechas para encajar a la perfección, como dos mitades que se unían y formaban la pieza perfecta.
Namjoon se dio cuenta de una cosa: No quería perder a Jin nuevamente.
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Memories. 🥀 [Namjin]
Fiksi PenggemarSu conexión era maravillosa, se amaban mas que a nada en el mundo. Pero tristemente los padres del mayor no pensaban lo mismo, hay quien no ve la pureza de un verdadero amor y optan por destruirlo al ir contra sus creencias. Nadie se esperaba que e...