Un perdón

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Es increíble cómo de un momento a otro tu vida parece estar colgando de un hilo. Y es que así la vida, tan frágil como una vela que puede apagarse con un fugaz suspiro...

Dolía. Claro que dolía el pensar en despedirse de Namjoon para siempre, el dejarlo, durante el tiempo que estuvo inconsciente solo podía pensar en una sola frase. "No llores más, aunque físicamente deje de estar contigo te acompañaré a todos lados. Te amo Namjoonie, te amo más que a nada en el mundo".

Su sorpresa fue enorme cuando despertó y parecía haber retrocedido en el tiempo, otra vez estaba en una cama de hospital, con una simple bata cubriendo su cuerpo, el típico suero, y está vez sintiendo varias punzadas de dolor en el abdomen.

—Le avisare al doctor que despertó —Se sobresalto un poco al escuchar la voz de una enfermera, está se alejó y a los pocos minutos el doctor entró acompañado de Namjoon y Hoseok.

—Estos chicos durmieron aquí esperando por verlo, eso sin duda es una gran muestra de cariño —Dijo el médico regalándoles una sonrisa y se fue dejando a los tres chicos solos.

—Jinnie —Nam se sentó al borde de la cama y tomo la mano de Seokjin, tan suave, encajaba perfectamente con la suya —No sabes cuanto miedo tuve, creí que te perdería

—También creí que moriría —Sonrió aunque esta sonrisa pareció más bien una mueca. —Nunca dejen que alguien les dispare, duele mucho —Rió levemente

—No es momento para tus chistes malos —Hoseok se cruzó de brazos y sonrió ampliamente, era un alivio el ver que su mejor amigo en todo el mundo estaba bien, aún dolorido pero con suerte sanaría pronto. —Está vez confió en que ya nadie los intentará separar, así que espero se casen pronto y me dejen ser el padrino de la boda

—Nos vamos a casar, eso es muy cierto —Fue Namjoon quien respondió y en las mejillas se Seokjin se instaló un pequeño sonrojo —Pero no hasta que se lo pida de una buena manera

—Me suena a que voy a morir de amor —Se sentó en la cama ignorando esa sensación incómoda en la herida cada vez que se movía y abrazo a Namjoon

—Mejor no mueras, ya fueron muchos sustos así

—Pues creo que sobro aquí —Hoseok sonrió enternecido y camino hasta la puerta —Me alegra que estés bien Jinnie —Ambos amigos se sonrieron y el pelinaranja salió de la habitación caminando por el pasillo.

Hoseok no era tonto como había pretendido serlo durante mucho tiempo, sabía que Taehyung sentía algo por el y sin embargo se mantuvo al margen. En primer lugar porque no podría rechazarlo, se sentiría como la peor persona sobre la tierra y en segundo porque aunque quisiera corresponderle no podía, él era arromantico lo cual quiere decir que no tiene interés romántico, válgame la redundancia, en otras personas.

No era un témpano de hielo, claro que sentía afecto hacia otras personas e incluso podía tener una pareja por un largo tiempo sin embargo sin interesarse en el romanticismo y Taehyung merecía alguien que le correspondiera al cien por ciento, por esa razón es que estaba tan feliz de verlo con Jungkook.

Y como si lo hubiera llamado con la mente el chico de sonrisa cuadrada venía a unos cuantos metros de el. Estaba entrando y atravesando la recepción mientras Hoseok llegaba a la sala de espera. Se sonrieron en cuanto sus miradas se cruzaron.

—¿Como está Jin Hyung? —Preguntó Taehyung en cuanto estuvo frente a su amigo, al que ya podía decir con toda certeza que lo veía así, como un simple amigo y no, no le guardaba ningún tipo de rencor por jamás darse cuenta de lo que sentía por el.

—Adolorido pero bien, Namjoon se quedó con el y como tenían mucho de qué hablar los deje solos... —Hoseok que le estaba explicando a Taehyung lo que pasaba comenzó a bajar el tono de su voz mientras su entrecejo se fruncía y ladeaba el rostro confundido —¿No es esa tú tía? —Señaló hacia la recepción

El peli-rosa se giró hacia allá y asintió frenéticamente. —Si, si es ella

No esperaban verla ahí pero solo podían rogar que no hiciera nada que alterará a Jin.

—Señora —Hoseok llamó su atención en cuanto está paso a un lado de ellos, les miro inexpresiva, ¡que novedad! —Namjoon está allá adentro, con su hijo y si piensa entrar a insultar o algo así le pido que mejor se retire

—Por favor, creo que ya fue suficiente con lo que su esposo hizo —La mujer dijo su vista en Taehyung y sonrió ladinamente, una sonrisa un tanto reconfortante.

—Les juro que no vengo en un mal plan. —Respondió la madre de Seokjin quien siguió caminando hacia la habitación de su hijo.

Llamo un par de veces a la puerta hasta que Namjoon la recibió y se hizo a un lado dejándola entrar después de saludar con un simple movimiento de mano que en otra ocasión la mujer hubiera encontrado grosero pero en ese momento solamente quería hablar con su hijo.

—Mamá... —Seokjin soltó la palabra casi en un susurro y pudo jurar que la sorpresa que en eso momento albergó su cuerpo, cuando su madre lo abrazo con fuerza, nunca antes lo había sentido.

—Perdóname, todo este tiempo he sido tan tonta, pretendiendo ser la esposa perfecta cuando de lo único que debo preocuparme es de haber sido una buena madre. Jamás debí dejarte solo, jamás debí dejar que ese hombre te pusiera un dedo encima —La mujer sollozaba en el hombro de su joven hijo que sentía como sus ojos comenzaban a picar, ¿estaba mal que el rencor fuera tan grande al grado de no querer perdonarla?.

Namjoon decidió que era mejor dejarlos solos y salió con sigilo.

—Creo que tuviste demasiado tiempo para arrepentirte, tantas veces en las que lloraba por los golpes que tu marido se encargaba de darme y tú solo me decías un "te lo merecías" —Hizo comillas con los dedos —Dejaste que me hiciera daño a mi para protegerte a ti, realmente no sé cómo es que una buena madre deba ser —Pasó saliva con fuerza y tomo un respiro largo y profundo, tomando la decisión de que aveces es mejor perdonar para no vivir odiando —Pero me diste la vida y no puedo simplemente despreciarte como muchas veces tú lo hiciste conmigo, así que te perdono. De corazón te perdono.

No podía negar que las palabras de su hijo se sentían como filosos cuchillos atravesándola, simplemente porque tenía razón en lo que decía y ella tardó demasiado en comprender, pero ahora no podía más que agradecer el haber obtenido el perdón de su hijo y esforzarse por recuperar su cariño. Se apartó con delicadeza.

—¿Tú sabias que papá causó el accidente en donde perdí la memoria?

No, ella no sabía nada acerca de eso y Seokjin lo supo por la expresión en su rostro.




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¡Espero se la pasen muy bien hoy y tengan un excelente Año Nuevo!. 💜

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Memories. 🥀 [Namjin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora