Cruel.

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-Choi, por favor concéntrate un poco más. No quiero a una tonta trabajando para mí.

-¿Que...? -Jiho la miro de pies a cabeza, la chica se notó nerviosa con eso.

-¿Cuántos años tienes?

-Ve-veintitres...

-¿Eres tartamuda?

-N-No...

-Si, creo que sí.

-No, directora...

-¿Tienes experiencia?

-No, pero daré lo mejor de mi.

-Bien... ¿Tienes alguna carrera?

-Estoy estudiando psicología...

-¿Cuando terminas tú carrera?

-En seis meses.

-¿Este trabajo es temporal para ti?

-Pues... Si, creo que sí.

-Entonces no debiste de haber venido acá.

-¿Que? ¿Porque...?

-El trabajo de una secretaria normalmente debe ser de un periodo más largo. Sin embargo, tu. Vienes solo para trabajar seis meses.

-Es que...

-No, mira... -camino al rededor del escritorio mirando las carpetas- No busco algo temporal mientras yo esté aquí. Dudo mucho que pase el resto de mi vida en Nueva York, tengo planes de ser directora ejecutiva de una de las empresas en Corea, en mi ciudad natal.

-¿Es de... Corea? -pregunto con cierto brillo en los ojos, algo que provocó un cosquilleo en el estómago de Jiho- Mis padres son Coreanos pero nos venimos a vivir a Nueva York desde que tengo uso de razón.

-Si la tienes ¿Porque no tratas de ser más profesional?

-¿Eh?

-Acabas de contarme algo que no me interesa. Es un tema personal y no laboral.

-Eh... Perdón... Yo... Me deje llevar. -bajo la cabeza.

-Necesito a alguien eficiente, que cumpla con todos los aspectos de una secretaria. Pero al parecer... -sus miradas se cruzaron, la mirada fría de Jiho peturbaba la mirada inocente de Choi- Tu no tienes experiencia.

Las palabras habian tocado la sensibilidad de Choi, quien casi se soltaba a llorar y a salir corriendo de ese lugar que parecía un lugar en el que tenías que sufrir para ser aceptada. Sin embargo, solo enderezó su espalda y con mucha seguridad miro a Jiho.

-Mire, directora. Yo no elegí este puesto, me contrataron porque veían en mi a una persona que se puede desarrollar laboralmente. Pero claro, como usted no ve más haya del "profesionalismo" o una carrera, no puede ver en mi a una chica honrada que se gana la vida para terminar su carrera porque mis padres no pueden pagarla... -miro de pies a cabeza a Jiho, con un bello vestido blanco, pero a una mujer, sin sentimientos- Se queda encerrada en la idea de que una secretaria siempre debe ser profesional.

Jiho se sentía indignada, era la primera vez que alguien la dejaba callada y sobre todo sorprendida por la situacion por la que pasaba. En cambio Choi, solo hizo una reverencia y respiró hondo.

Alguien tocó la puerta y había entrado Susan aún sin el permiso.

-Lamento causarle problemas. Al parecer no soy capaz de tener el empleo de secretaria. -levanto la mirada nuevamente- Con permiso.

Susan estuvo a punto de detenerla, pero prefirió preguntarle a Jiho lo que sucedía.

Y claro, cobardemente se quedo callada y pidió que la dejarán sola.

Mi Secretaria.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora