NARRA KAELA:
Camino por las grandes calles de esta ciudad. La gente va pasando, algunos me miran raro, otros cuchichean y otros simplemente me miran con lastima, como si tuviera alguna enfermedad, aunque entiendo que me miren así, habitualmente no se ve a una joven como yo.
Bonita-me giro.
Una mujer de unos 50 años me mira sonriendo mientras yo retrocedo algo desconfiada.
Ey, tranquila-sonrie-¿Estas buscando a tu abuela verdad?
Si...¿Cómo lo sabes?-digo seria.
Ella sonríe mirandome, arremanga la manga de su Jersey y me muestra la marca, una marca que solo tenemos los alfas de una manada, en forma de cabeza de lobo.
¿Eres como yo?-la miro.
Tranquila, yo te llevaré con ella-sonrie.
Ella me guía, yo sigo desconfiando de ella, puede que tenga la marca pero no sé qué intenciones tiene. Llegamos a una casa, está algo vieja pero no como las demás de su alrededor. Ella toca a la puerta y de un momento a otro se abre produciendo un sonido chirrioso verdaderamente molesto.
Pequeña-me sonrie.
La miró, una mujer de unos setenta años está de pie frente a mi, trago saliva y ella me abraza con fuerza.
Aire-suplico.
Perdón perdón-rie y me suelta-es que hacía mucho tiempo que no te veía, estás guapísima.
Miró la casa, pasó la mano por algún mueble que otro. Verdaderamente parece que está mujer es mi abuela, tiene fotos mías de pequeña, incluso tiene unas que yo no sabía ni que existían. Tomo una foto, en ella estoy yo de pequeña, con mis padres, tenía cinco años. Muerdo mi labio con rabia y aprieto mis puños, los mataron cuando yo tenía solamente 12 años.
Lo se cariño-murmura poniendo sus manos sobre mis hombros-a mi también me dolió que los mataran.
Cojo aire intentando disolver el nudo que se a formado en mi garganta y que me impide pronunciar palabra.
Yo soy Mónica y ella es Abril-sonrie-nosotras te ayudaremos a controlar tus poderes.
¿Controlar?-las miro.
Si-asiente-como has vivido siempre en el bosque no has aprendido a transformarte cuando quieras.
Asiento, sigo mirando la foto de mis padres, los echo muchísimo de menos...
Puedes quedarte la si quieres-me mira.
Gracias-digo acariciando la fotografía-
Termina por enseñarme la que va a ser mi casa desde ahora, ojalá pudiera volver al bosque.
NARRA ADEXE:
Miró unos papeles nervioso, hoy tengo una reunión muy importante.
Le falta media hora-sonrie acercándose.
Gracias-la miro.
Ella coge una silla, me gira y se sienta frente a mi mirándome fijamente.
¿Sabe que?-me acaricia.
¿Qué?-me aparto.
Es usted un hombre muy atractivo-muerde su labio.
Me levanto.
Fuera del despacho o te despido-digo serio.
Oh vamos-rie-¿no me diga que tiene novia?
No, no tengo novia-la miro.
Podemos pasar un buen rato-sonrie acariciando mi cuello.
Apartó su mano.
Señorita-la miró serio-controlese y respetese un poco, le he dicho muchísimas veces que no quiero nada con usted.
Se marcha furiosa, yo acerco mi silla a la ventana, necesito relajarme. De repente veo a una chica, que me resulta muy peculiar, parece algo perdida.
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Me Haces Tanta Falta.
Fanfiction¿Has oído alguna vez el ruido que hace una persona al romperse?