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NARRA JUAN:

Ella empieza a temblar, me acerco a ella pero en seguida se aparta.

Largate-dice fria.

¿Que te pasa?-la miro.

Nada-suspira.

La cojo de las mejillas, las acarició y suspiró, como me gustaría besarla...

Ana,confía en mi-suspiro.

No puedo contarte esto...-mira al suelo.

Suspiró, ella llora pero me mantengo frío.

¿Tan poco confías en mí?-digo serio.

Claro que confío en ti-me mira.

Pero no lo suficiente como para contarme lo que te pasa-me apartó.

Entiéndeme...-se le humedecen los ojos.

Te entiendo-respondo cortante.

Me mira, sus ojos se clavan en los míos y suspiró.

¿Para que venías?-limpia sus lágrimas.

Déjalo, ya da igual-murmuro.

No da igual-me mira.

Se acerca, trago saliva y miro hacia otro lado, sé que si sigo así acabaré rendido a sus pies y no puedo.

Cuéntamelo-agarra mi mano.

Una corriente eléctrica me recorre, suspiro y la miro.

Puedo ayudarte-me mira.

No, no puedes-digo frio.

Claro que sí-me mira.

Estoy enamorado de ti-grito confesando me.

Me suelta, se sienta y lleva sus manos hasta su cabeza, "no puede ser" repite una y otra vez y eso me rompe más de lo que ya estaba.

Eres un chico estupendo-suspira.

Pero no me quieres-suspiro.

No...-murmura.

Me quedo callado, lo entiendo, en el fondo sabía que una chica tan maravillosa nunca se fijaría en mi. Mis ojos se humedecen.

Juan...-suspira.

Da igual pequeña-murmuro besando su frente-se feliz ¿Vale? Yo estaré bien.

Pero...-llora.

Déjalo estar-suspiro.

Salgo de allí, golpeó todo a mi paso, necesito desprenderme de toda esta rabia, olvidar por un rato...

Ey chico, ¿te pasa algo?-les miro.

Necesito olvidar-suspiro.

Esto te vendrá bien-rie.

Abre mi mano, me pone dos pastillas.

Con esto lo olvidarás todo por unas horas-se marcha.

Miro las pastillas, no es buena idea pero necesito olvidar toda está mierda que llevo encima.

NARRA KAELA:

Me marcho del bar donde había quedado con unas amigas, necesitaba salir. Camino por las calles de alrededor, siento que me persiguen y miro hacia atrás.

¿Hola?-grito.

Silencio, un silencio incómodo, camino más deprisa, tengo miedo. Alguien se pone frente a mí y doy un fuerte grito que en seguida calla poniendo su mano en mi boca.

Bonita-rie-no grites que te irá de mal en peor.

Siento una presión en mi estómago, un arma de fuego, el pánico se apodera de mi.

¿Que quieres?-digo como puedo.

Dile a tu noviecito que me encargaré de quitarle toda su fortuna-dice frío.

Mi novio no es millonario, sueltame-le muerdo la mano.

Se aparta, agita su mano en el aire y suspira.

Maldita niña-dice frio-esa familia me va a devolver todo lo que me han arrebatado.

¿Se puede saber el que?-digo borde.

No te interesa-dice cortante.

Si, ¡si me interesa, has querido dispararme por esto!-grito.

Siento un dolor agudo en el estómago que me hace caer al suelo, me ha disparado.

Me las pagarán-se marchan.

Suspiró, me duele, la sangre no deja de salir, pongo mi mano en la herida, joder, ¿Algún día podre ser feliz? Creo que no.

Me Haces Tanta Falta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora