Crónicas de una tartamuda

Introduccion y aclaracion para los fluidos

No empecé a tartamudear desde que aprendí a hablar, no yo empecé a los 7 u 8 años, era una niña muy feliz y extrovertida...hasta que llegó un niñito malcriado con la famosa frase que marcó mi vida.

-¿ por qué suenas tan graciosa?

Luego de esas 5 palabras, todo cambio dentro de mi, me hice consciente no solo de que sonaba "graciosa" sino además de que debía ocultar mi tartamudeo.

Ahora, los que hablan fluidamente, pensarán, "¿pero porqué hacen tanto drama simplemente por tartamudear? Si todos tartamudeamos a veces y es muy normal"

¡MENTIRAS! No para todos los fluidos la tartamudez es normal (más adelante lo comprobarán), y además, el problema no es tartamudear en si, es lo que se siente hacerlo.
Ya, para que se enteren un poco más, imagínense un iceberg, la punta que se ve es el echo de tartamudear, pero lo qué hay debajo...pues es la vergüenza, la frustración, la tristeza y todo lo que conlleva tener un defecto en una sociedad como la de ahora.