¿Te gusta esta pareja? Ven y lee algunos cortos que he escrito sobre ellos dos. Te aseguro que vas a sentir muchas emociones al leerlos.
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◑ Portada editada por mí, créditos a los dueños de las imágenes.
◑Hecha con fines de entretener.
◑Pareja:...
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Solía mirarlo desde la lejanía admirando toda su belleza y los encantos que me ponían loco, en especial esos ojos color cielo que básicamente me hacían pensar que estaba en el paraíso.
Lástima que yo solo podía acercarme a hablarle para cosas normales, pero cuánto hacía notar mis sentimientos frente a él con la mínima palabra emitida por mis labios. No sabía cómo definirlo exactamente.
Pero debidamente sí había algo que me inquietaba y hacía sentir frustrado. Se debía a mi autoestima, esa cosa moral que dependía bastante de cómo me iba o cómo me trataba Nagisa, quien se había robado mi corazón. Se notaba muchísimo que no me amaba.
Pero estaba bien, porque de todas formas yo tenía mi amor propio o eso era lo que quería creer. Nunca había sido del tipo de persona que por una tragedia en su vida ya se sentía como una completa mierda, pero el hecho de que Nagisa no me correspondiera sí me hacía sentir como una mierda. La peor de todas.
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Llegué a la escuela demasiado temprano y ahí estaba él. Era el único presente en el aula y la idea de tener que entrar como debidamente era, me ponía nervioso, no podía soportar estar solo con él.
Me quedé observándolo desde la entrada, oculto tras la pared que cubría el aula. ¡Era demasiado encantador! Cada parte de él me gustaba y me hacía suspirar como un tonto.
Pero otra razón para rendirme es que todos sus encantos y el amor que habría podido darme pertenecían a otra persona.
Ah, solo pensarlo me causaba ganas de llorar, pero no me dejaría entristecer por algo así. Él debía ser feliz aún si no fuera conmigo. De hecho, la idea de que yo no merecía estar con él se me metía en la cabeza y que cualquiera podría merecerlo, a excepción de mí.
Esperé a que algunos de nuestros compañeros entraran y cuando sentí que eran suficientes entré. Sinceramente no me gustaba decirle a nadie cómo me sentía, es decir, no confiaba en nadie como para contarle lo que sentía por Nagisa, ni siquiera quería que alguien me consolara o me diera ánimos, pero cuando creí que todo se había ido al diablo no pensé que podría ser aun más así.
