Se anunciaba en el reino una pronta boda muy esperada para los aldeanos y altos de la realeza. Se trataba del príncipe Nagisa, quien ya había cumplido la edad suficiente para comenzar un matrimonio y una bella doncella del pueblo llamada Akari Yukimura. Ambos habían interactuado un poco antes de casarse, pero aún así ninguno de los dos pareció molestarse por lo que vendría.
El día de la boda llegó y muchos de los invitados estaban felices por la unión de tan bella pareja. Ambos se juraron amor respectivamente en el altar alegrando el aura del reino con lo que vendría para el futuro con los nuevos gobernantes. Solo que como siempre, pueden haber personas a las que les gustara lo sucedido pero a otras no, entre ellas un amante despechado que vio la alegría escapar de sus manos cuando ambos novios aceptaron al otro como esposos.El enojado y triste amante no pudo hacer más que maldecir todo lo relacionado con el matrimonio, entre ello a la iglesia. Él se mantuvo en secreto temporalmente y también manteniendo en secreto sus desconsolados sentimientos.
Unos meses pasaron después de la ceremonia, la ahora princesa Akari había estado tan feliz después de su boda, pero como el tiempo pasó, ella y Nagisa apenas si hablaban y cuando interactuaban mucho era solo por asuntos de suma importancia, principalmente sobre temas del reino u organizaciones en él.
Ella miraba por la ventana el reino y a lo lejos donde solía vivir, ella se sentía triste y desgraciadamente quería vivir como antes, como una mujer de pueblo con quehaceres normales y no una princesa infeliz. Habría sido menos doloroso si ella no se hubiera enamorado de Nagisa, porque era él quien limitaba el contacto entre ambos. Además de que se sentía en una jaula, con cosas que debía hacer exclusivamente y estaba tan limitada, hasta limitada a poder amar y expresarse.
La pelinegra se hallaba sola en la habitación que compartía con su esposo. Aún con su mente divagando sobre su tristeza vio una nota sobre el tocador. No sabía si era para ella o para Nagisa, pero quien la había escrito quería tener un encuentro en el jardín principal del castillo.
Akari supo que la nota era para Nagisa ya que no lo había visto en ninguna parte. Así que se dio prisa para saber para qué lo habían citado. Estaba tan ansiosa.
Se dio prisa y corrió y corrió hasta llegar al lugar citado, pero lamentablemente ya era demasiado tarde y lo supo al percatarse de la escena con la que se encontró.En el suelo estaba su esposo muerto con una herida de lado a lado en su abdomen. La sangre escurría manchando el fino suelo y gran parte de las prendas reales que él tenía en aquel día. Ella no pudo quedar más aterrada por la imagen de su amante sobre el suelo muriendo.
Alzó su vista hallándose con el asesino de Nagisa y quien había escrito la nota, un hombre pelirrojo que en su mano cargaba el arma con la que había cometido el asesinato: un cuchillo. Chilló asustada alejándose unos pasos de él. No tenía idea de quién era ese hombre, pero sí sospechas y algunas conllevaban al comportamiento alejado de Nagisa.
El hombre lloraba sosteniendo el cuchillo aún, así que entre sollozos exclamó:—. Ya no seré el amante secreto —tomó con más firmeza el arma en su mano—. Ya sea en el cielo o en el infierno, un sitio al fin solo para los dos.
Y clavó el cuchillo que sostenía en su propio estómago acabando con su vida por el exceso de sangre perdida. Calló al suelo por falta de fuerza y Akari simplemente no pudo estar más aterrada por ver a un par de muertos frente a ella. La pobre lloraba de miedo y tristeza, cayendo luego en cuenta de que el príncipe en realidad fue forzado a casarse con ella y el matrimonio fue ciertamente arreglado.
Al no haber príncipe, Akari se vio obligada a volver a su antigua vida cargando con lo sucedido.
Los dos hombres fueron enterrados como debía ser, pero con el detalle de que estaban tomados de sus manos. Donde sea que fuera ambos podían estar juntos finalmente, solo que no contaron con que pasaron por encima de las emociones de la exprincesa.
Debo confesar que en realidad en la imagen del separador Karma tiene un condón en su boca, pero la imagen me pareció tan perfecta e ideal para este one-shot. Así que lo cambié por un corazón xd
Me gustó mucho escribir esto. Es tan distinto a lo que suelo hacer, así que estaba tan emocionada por redactarlo^^ Le puse más detalles de lo que tenía la canción porque quedaría bien corto sino alv.
Cuando me pidieron esta canción creí que sería una de esas canciones actuales que se oyen en todas partes y sinceramente no me gustan mucho..., pero cuando me di cuenta de que era todo lo contrario y algo bien hermoso, me emocioné mucho.
También cuando la oí la primer vez me pareció tan canción de animes viejos o de alguna peli de Disney, pero más la primera. PERO ES DE ESTE AÑO Y ROMPIÓ MI LÓGICA.
Rola:
ESTO ES ARTE. APRÉCIENLO.
Por cierto, aquí termina la sección de canciones a pedido. Creo que haré otra más adelante, pero por ahora quiero darme un tiempo sobre esto de los one-shots porque no siento estar haciéndolo tan bien. Así que supongo que mi regreso a este libro podría ser en uno o dos meses xd o tal vez antes, idk.
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♣KarmaGisa↭One-shots♣
Fiksi Penggemar¿Te gusta esta pareja? Ven y lee algunos cortos que he escrito sobre ellos dos. Te aseguro que vas a sentir muchas emociones al leerlos. ↭↭↭ ◑ Portada editada por mí, créditos a los dueños de las imágenes. ◑Hecha con fines de entretener. ◑Pareja:...