♥Almohada

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Estaba aferrado a sus sábanas con fuerza y sin expresión alguna en su rostro

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Estaba aferrado a sus sábanas con fuerza y sin expresión alguna en su rostro.

Quería sentirlo junto a él. Darle alguna muestra de afecto, al igual que recibirla. Pero lamentablemente no se había podido, no se podía y no se podría por bastante tiempo.

Nagisa yacía recostado sobre su cama con tristeza. Sostenía su celular mirando algunas de las fotografías que tenía junto a su actual pareja en muy lindas escenas, y con su mano restante asía la sábana con fuerza.

Lamentablemente tenía una relación a distancia que ya estaba cumpliendo seis meses.

El pobre había creído que el amor era meramente fácil, todo con perfección, cariño y honestidad, pero no pudo estar menos equivocado cuando Karma tuvo que partir y dejarlo por un buen tiempo. No había sido egoísta al dejarlo ir pero fue muy grande el costo al hacerlo, más el peso de su dolor.

Sería capaz de volar miles de kilómetros por él, pero no todo era posible de inmediato, por el momento debía conformarse con las imágenes y algo más...

Pensar que finalmente había encontrado a alguien considerable para él como perfecto y precisamente un obstáculo como el presente debía suceder. Vaya suerte.

Dejó su celular sobre la mesa de noche aún con todos aquellos recuerdos y pensamientos invadiéndole. Suspiró tomando las sábanas en sus manos y cubriéndose. Luego de acomodarse de lado, miró al frente, encontrándose con algo que lo hacía sentir mejor: una almohada.

Después de todo era solo una noche más sin el amor de su vida y lo único similar que encontraba a él era una almohada —más la producción de su imaginación—. Sí, sonaba ridículo, pero no le quedaba de otra para deshacerse de su dolor y desesperación. Había sido poco tiempo sin él pero siendo comparado por Nagisa como años.

Agarró la almohada con sus brazos apretujándola contra su cuerpo. Apoyó su rostro sobre ella; primero la olfateó creyendo que era el delicioso y tranquilizante aroma corporal de Karma. Tocaba la textura de la almohada con sus dedos imaginando que era la cálida y suave piel del amor de su vida, y finalmente se hacía la idea de que él estaba ahí a su lado cumpliendo su fantasía. Añadiendo a su mente algunas escenas de ellos dos juntos o simplemente pensaba en los momentos que habían vivido ambos cuando estaban juntos.

Ese era el consuelo de Nagisa y aunque sonara efectivo —y muy extraño a la vez— no era de tal forma todo el tiempo. A medida que pasaban los días, el dolor aumentaba y por lo tanto, se le hacía más difícil convencerse a sí mismo.

Desde el principio creyó que estaría bien hasta el final de aquella prueba, pero empezaba a dudar.

Su paciencia de igual forma disminuía, sentía haber estado esperando demasiado y no soportaba. Se estaba volviendo loco, por más exagerado que sonara.

Al final se quedó dormido con la almohada entre sus brazos y al despertar estos siempre estaban en la zona donde esperaba que estuviera Karma. Con resignación lanzó la almohada lejos, sus ojos estaban hinchados de tanto llorar y su rostro pálido. Se dio la vuelta hacia donde estaba la pared con disposición a dormir de nuevo para deshacerse de todo su sufrimiento y deprimentes pensamientos.

Cuando de repente sintió unos brazos rodearle, más la respiración de alguien tras de sí. Se talló los ojos tantas veces creyendo que era un sueño, pero lo único que había logrado era lastimarse. Se dio la vuelta finalmente hallando aquella presencia que había estado anhelando desesperadamente hasta volverse loco.

—Has vuelto... —sonrió como nunca lo había hecho y correspondió a su abrazo llorando, no comparado como cada noche ya que era por felicidad y por darse cuenta de que todo el sufrimiento había valido la pena.

—Me quedaré por siempre. Ya no tendrás que esperarme más.

Seguía creyendo que todo era un sueño o un mal juego, sin embargo, para nada había sido así y aunque tuviera miles de dudas carcomiéndole la mente, lo estaba disfrutando. Ya no estaba solo sufriendo, no debía imaginar o seguir viendo escenas de ambos porque podría vivirlas y hacer nuevas, ya no tendría que seguir fantaseando porque su más grande fantasía se había cumplido. Y ya no tendría que seguir agarrando su almohada creyendo que todo estaría bien.

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Actualizo a altas horas porque soy lo más¿

Y la dvd no actualizaba desde julio, plox. Ya hacían falta los one-shots.

Es obvio que muchos han fingido que una almohada es una persona aksjnsnsn. ¿O solo Nagisa y yo somos los raros?

Tal vez algunos hayan leído o no lo que puse en mi tablero de mensajes, pero tengo planeado hacer one-shots basados en algunas de las canciones de Bebe Rexha. Para ser más específicos, de las últimas diez que ha subido.

Aprovechando que todas son de amor y que de la mayoría me he ideado ya una trama mental.

Así que, pues nada, este es el primero e irán en el orden en que ellas las subió o al menos eso intentaré hacer.

Y como pienso hacer, les dejaré la canción en la que me basé por aquí:

Cin sibtítilis piri lis qui ni sibin inglís. Ahre.

  Obviamente los créditos van a ella por algunas partes usadas de la canción. Aunque procuré no hacerlo mucho... los envidiosos dirán lo contrario, otzea¿

Casi lo olvido, no tiene separadores porque no puedo editar por el momento :p así que los haré cuando pueda.

 ♣KarmaGisa↭One-shots♣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora