Yukina... ¿se va?

Vuelve a mí

Por Yukina

Kisa-san estaba por irse... Yo no podía creer lo que pasaba... Esto era increíble... Pero, si pierdo a Kisa-san ahora... Todo por lo que he pasado no habría valido la pena, permanecí en el mismo lugar algunas décimas de segundo antes de reaccionar...
Kisa-san avanzaba cada vez más hacia la salida...
Por un momento, parecía que no lograría alcanzarlo...
Hice un último esfuerzo, si él abría la puerta del departamento sería el fin, de eso estaba seguro, me lancé hacia él y lo atrapé en un abrazo, él soltó el pomo de la puerta y dejó caer los brazos a los lados, no respondió a mi abrazo, pero no hizo ningún esfuerzo por apartarse de mi lado, no fui rechazado pero, sentí como mis brazos se humedecían al caer sobre ellos la evidencia de las lágrimas de Kisa-san...

Le giré para mirarle, sus orbes me miraban con dolor reflejado en el rostro, sus ojos bañados en lágrimas, no pude hacer más que abrazarle, él quiso alejarse de mí, yo no voy a permitir esto...

LO AMO

LO AMO CON TODO MI SER

No quiero perderlo nunca más... Quiero tenerlo a mi lado, para siempre...

---suéltame--- por fin respondió.

---no

---¡por favor! No me hagas más daño... Por favor...

--- no quiero hacerte daño... Quiero hacerte feliz.

---mientes...

---te amo sólo a ti Kisa-san

---mentiroso

---no, no miento, quiero estar contigo, a tu lado, siempre y en todo momento de nuestras vidas.

---¿qué hay de ésa chica?

---no hay ninguna chica.

---¿porqué la niegas?

---porque no hay nadie a quien yo ame más que a ti

---¿entonces porqué...?

---porque...--- ¿cómo debería explicártelo Kisa-san?

---no sabes que decir...

---es que yo...

---por favor... Sal de mi vida...

---no, Kisa-san yo... Te amo. No quiero dejarte ir porque te amo, no hay nadie más, seguro que... Ha sido un mal sueño... Una pesadilla... He soñado... Que te perdía Kisa-san...

---¿debería creerte?

---...Yuuko... Es la persona que me ayudaba a recuperarte, ---era mentira, pero si le decía la verdad lo más probable es que fuera tomado por loco, así que preferí darle otro rumbo a lo sucedido--- seguro... Que escuchaste mal y yo decía tu nombre...

---mentiroso

---es porque tú también me amas y temes perderme, ¿no es así Kisa-san?

---...engreído... tú mocoso no sabes...--- no le he dejado terminar de hablar, le he interrumpido con un beso, el cual Kisa-san no pudo evitar responder, se aferro a mí, me rodeo el cuello con los brazos y yo le he tomado de la cintura, hicimos aquel beso más demandante, sé que me ama, sé que me necesita, yo lo necesito a él, necesito que sepa que lo amo, necesito tenerlo a mi lado siempre y necesito hacerlo mío, antes de esto... Han pasado para él solo unos pocos días... Pero para mí, han sido años de sufrimiento y dolor lejos de él, no quiero perderlo de nuevo.

---Yukina...

---¿si?

---¿de verdad me amas?- me preguntó con miedo y con lágrimas en los ojos por temor a una respuesta que pudiera partirle el corazón, lo sé con sólo mirarle. Lo miré con ternura mientras sonreía, lo tomé de la mano y lo jalé hacia mí en un abrazo para darle la seguridad y confianza de que solo le amo a él y así será siempre.

---te amo Shouta...

Le ví sonrojarse, tomó con fuerza mi playera y se acurrucó en mi pecho, él es la cosa mas linda que puede haber sobre el planeta, ¿cómo podría no amarlo?
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Logré convencer a Kisa-san de quedarse a mi lado el resto de la tarde, al final no pude controlarme y lo hice mío nuevamente... Shouta-san es mío, me ama tanto como yo a él y me lo ha demostrado todo este tiempo, también debo corresponder adecuadamente a esos hermosos sentimientos que tiene por mí y debo compensar todo el miedo y preocupación que sintió estos días, me esforzaré cada día en hacerlo feliz, no importa lo que pase, no dejaré de amarlo y estaré a su lado siempre...
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Externo

La mañana llegó, el primero en despertar fue el joven castaño, se quedó en la cama abrazando al pequeño azabache, quien aún dormía plácidamente; poco a poco fue abriendo sus ojos y miró al castaño a su lado, al principio se sorprendió pero después de recordar lo sucedido sonrió, se acercó todavía más al castaño y éste le besó en la frente haciendo sonrojar a Kisa pero ya no importaba, ambos habían decidido estar juntos.

---Kisa-san...

---¿qué pasa?

---yo... Te mentí...

---...--- la sorpresa asomó a los ojos del chico quien trató de levantarse pero fue detenido por Yukina, lo acercó hacia sí para abrazarlo nuevamente.

--- lo he pensado y, creo que es correcto decirte la verdad.

---¿qué quieres decir?

---cuando... Te dije que tuve una pesadilla... Y dije que te perdía... Aquel nombre que escuchaste... No era una mujer...

---¿qué?

--- era una niña Kisa-san...

---no te entiendo nada

---digo que... Tuve una pesadilla donde perdía tu amor y el de... Yuuko...

---...Yuuko... Otra vez...

---Kisa-san... Yuuko, era nuestra hija...

---¿n-nuestra hija? ¿Pero de qué estás hablando? ¡Eso es imposible!

---pero, de verdad fue así... ¿Nunca... Habías pensado en tener hijos Kisa-san?

---bueno, nunca había pensado en niños... Pero adoptar un niño tal vez lleve demasiado tiempo...

---no Kisa-san, me refiero a que... Estabas embarazado de nuestra hermosa hija Yuuko--- su sonrisa apareció en aquel bello rostro al recordar a aquella pequeña.

---¡¿Eh!? ¿Pero qué estás diciendo? ¡Algo como eso es imposible!

---tal vez pero, eso... Es lo único que ocurrió, de verdad. Te lo digo porque... Si tenemos una hija quiero que lleve ése mismo nombre... Tú lo elegiste después de todo.

---¡baka! ¡Eso no va a pasar! S-seguro que todavía tienes fiebre---

La noticia era algo desconcertante, es por ello que el más bajo de estatura se levantó a prisa de la cama, se vistió rápidamente hecho un manojo de nervios y se metió al baño para buscar medicamento para la fiebre, mientras el castaño lo veía con una sonrisa, la cual delataba que estaba completamente enamorado de aquel azabache.