Capítulo IX

233 23 6
                                    

Silvia

Valentina al fin llega, -lamento haberme demorado, pero había un trafico terrible, odio esta época del año.

-no hay problema, pero cuéntame a que se debe tu urgencia por verme.

-ven vamos al despacho. -un poco confundida la sigo a través de la sala, entramos en la habitación y luego de que cierra la puerta y tomamos asientos.

-bien me tienes un poco nerviosa, por favor ya dime que pasa.

-Carlos me es infiel

-que?

-que me es infiel

-porque piensas algo así

-la otra noche llego tarde, el nunca llega tarde.

-esta buien, pero eso no es motivo para pensar que te es infiel

-no es solo eso, desde hace unos meses lo siento extraño y ademas..

-ademas que?

-me pidió el divorcio y desde hace dos semanas duerme en otra habitación.

-pero no te dijo el porque?

-me dijo que no podía seguir conmigo, que yo merecía a alguien que me valorara.

-no se que decir.

-no lo se, si hablas con Marcos quizás él te puede decir si Carlos esta saliendo con alguien.

-no creo que él te este siendo infiel.

-por favor Silvia, tienes que ayudarme con esto, hazlo por nuestra amistad.

-esta bien, pero no te prometo nada

-gracias, gracias, sabia que podía contar contigo

-lo siento es tarde, debo irme.

-no te quieres quedar a comer

-no gracias, he quedado con mis padres

-están aquí?

-sí, han venido unos días para quedarse conmigo.

-me encantaría verlos

-claro, podemos hacer algo.

-va!!! me avisas.

me despido de Carlitos y voy al restaurante donde quede con mis padres, no puedo dejar de pensar en lo que acabo de hablar con Val.

busco mi teléfono celular y le envió un mensaje a Carlos.

-Crees que podemos juntarnos para hablar?

vuelvo a guardar el teléfono en mi bolsa y me apresuro. veo a mis padres y me acerco hasta su mesa, los saludo.

-como has tardado hemos pedido por ti, espero y no te moleste mi amor.

-no papi esta bien.

-porque te has tardado?

-estaba con Valentina, tenia algo que decirme 

-y como esta ella?

-bien. - para mi suerte el camarero se acerca con nuestra orden y cambiamos de tema, pues no me apetece hablar con mis padres sobre Calos y Valentina.

El resto de la tarde la pasamos recorriendo los centros comerciales, reviso mi teléfono para ver si Carlos a respondido a mi mensaje, pero no lo ha hecho, me supongo que sigue molesto por haberlo ignorado durante todo este tiempo. Una vez llegamos a casa me despedí de mis padres y me dirigí a mi habitación.

Una Segunda OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora