Capítulo XV

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Silvia

Siento que algo se clava en mi espalda, lo busco, es mi teléfono celular, en medio de la oscuridad lo tomo y lo lanzo al piso, junto con el revoltijo de nuestras ropas.

Marcos hace un camino de besos  hasta llegar a mis labios, me posee, me hace el amor con su lengua, ¡vaya!
Todo esto es alucinante, me penetra y yo me aferro a su cuerpo mientras el entra y sale de mi cuerpo, quiero más, necesito más, por lo que lo que hago un movimiento que el entiendo y ahora soy yo quien tiene el control y dirige el movimiento de nuestros cuerpos, comienzo a marcar mis movimientos, lentos y circulares, toma mis caderas, pero yo apartó sus manos y sigo con mi lenta tortura,  ¡Silvia!
Gime mi nombre una y otra vez Silvia, Silvia, Silvia, ¡Oh sí!
Me abraza y nuestros cuerpos se unen haciendo uno solo,  siento como mi segundo orgasmo se apodera de mí y Marcos me acompaña.
Una vez nuestras respiraciones se normalizan nos separamos, estoy empapada de sudar, por lo que me dirijo al baño para darme una ducha rápida, mientras Marcos se encarga de cambiar las sabanas.
Regresó a la habitación y tomo mi pijama, la cual Marcos a dejado sobre el sillón.

- ¿Amor?
- ¿Dime?
-Me llamarías por teléfono, no encuentro mi celular.
- Claro, dame un segundo.
- buscó el mío y marcó. Está debajo de la cama, mientras revisó las llamadas, me doy cuenta de qué alguien ha llamado a Carlos desde mi teléfono.
- ¿Marcos?
- ¿si?
- ¿Has llamado a Carlos?
- No, ¿Por que lo dices?
Sabes muy bien que ya no somos amigos.
- Alguien lo ha llamado, quizás fue Carla.
- No, ella no ha entrado, además la habitación tiene seguro.

-........

Minutos Antes:
Carlos al escuchar gemir a Silvia decide colgar la llamada muerto de celos

-......
Silvia piensa en que ha pasado, hasta que saca sus propias conclusiones.
Marcos la ignora y se dirige al baño, pero ella lo detiene.

- Marcos, espera
- ¿Qué?
¿Qué pasa?
- Es que se marcó al número de Carlos
- ¿Y?
Eso ya lo sé
- Cómo que "Y"?, ¡Marcos, Carlos me escuchó gemir!
- Pues que bueno a ver si así deja de hablarte
- Ya hemos hablado de esto y te repito que eso va a ser completamente imposible, te recuerdo que tenemos una hija en común. Pero bueno debo llamarle para disculparme.

Marcos al escuchar a Silvia se dirige al cuarto de baño y Silvia lo sigue

- Marcos, no es para que te enojes sólo llamaré para disculparme
- Haz lo que quieras

Silvia volteó los ojos y marcó al número de Carlos, luego de haber sonado tres veces Carlos toma la llamada

- Bueno
- Carlos, te llamaba para disculparme por lo que escuchaste hace rato, la verdad es que... -Carlos no la dejó terminar y dijo:
- No tienes por qué darme explicaciones al fin ¿Él es tu pareja no? -dijo a pesar de estar muriéndose de celos.
- Pues si, pero de verdad mil disculpas, no me percaté de que se marcó
- Silvia, ya por favor me hierve la sangre de celos y tú recordandomelo
- Pues la verdad no entiendo por qué estás celoso, si al final de cuentas tú estás saliendo con la maestrita aquella ¿No?
- ¿De qué hablas?
- ¡Por favor Carlos!, Sabes muy bien que hablo de la maestrita de Carla
- Ah o sea, ya no es Sandra, ahora es la maestrita
- Por favor, Carlos, no te salgas por la tangente.
- ¿Pues que quieres que te diga?
- Nada, sólo que no estés de celoso mientras tú estás noviando con la maestrita de Carla.
-deja de llamarla "Maestrita" te repito ella tiene un nombre y es Sandra, respecto a la llamada, no tienes porque darme explicaciones, tú puedes hacer lo que quieras y con quien quieras.
-eres un imbécil, si te llame fue para pedirte disculpas, no para pedirte permiso.
-pues ya me pediste disculpas.
No espero a que ella le contestara, colgó el teléfono y la dejo con la palabra en la boca.

Silvia molesta por la discusión con Marcos y ahora con Carlos, aventó el teléfono al suelo y cansada de todo decidió descansar, Marcos sale del cuarto de baño y se acuesta en su lado de la cama, en el transcurso de la madrugada Silvia trató de acercarse a él, pero la rechazó.

***
Marcos despertó y sin hacer mucho ruido se dirigió al cuarto de baño, donde tomó una ducha, antes de irse pasó a la habitación de Gerardito y se despidió de él.

Para cuando despertó Silvia se percató de que Marcos ya no estaba, supuso que habría ido al golf como es de costumbre, decide quedarse en la cama, pues está cansada, tanto física, como emocionalmente, pero eso tranquilidad no dura mucho, pues Carla irrumpe en la habitación.

-mamá, ¿a qué hora viene papá por mí?
-no lo sé.
- y  si lo llamó.
-como quieras.
-¿me presta tu teléfono?
-que te parece si mejor lo llamas desde el teléfono fijo.
-está bien.

Carla toma el teléfono que está sobre la mesa de noche y marca el número de su padre, un par de tonos y el al fin contesta.
-Hola papi
- Hola mi amor
- ¿Vendrás a buscarme el día de hoy?
- Sí, quiero contarte algo.
- ¿Que es?
- No comas ansías,  más tarde lo sabrás.
- y si mejor me das una pista.
- No, no seas tramposa, lo sabrás muy pronto.
-Está bien, te voy a estar esperando.
- Nos vemos amor.
- Hasta luego papi

Silvia estaba ansiosa por saber a qué se refería su hija.

- ¿Y bien?
Que ha dicho tu padre.
- Dijo que vendrá a buscarme en un momento y que tenía que darme una noticia.
- ¿Ah sí?
- Sí, voy arreglar mis cosas.
-Vale

Silvia no podía dejar de pensar en la noticia que tenía que darla Carlos a su hija, quizás era algo sin importancia, pero sin saber porque, esto le inquietaba más de lo necesario.

Pero ni modos, tendría que esperar hasta el domingo que Carla volviera a casa y le contara de que se trataba tanto misterio por parte de Carlos.

Continuará...

(Como bien saben desde ahora trabajaré en conjunto con silviasilvayya ambas trabajaremos en cada capítulo y en la creación de la segunda temporada de "Bajo Sospecha")

Una Segunda OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora