Follow Your Destiny [FNAFHS - Fanfic Aventura]

Capítulo 22: El Tren Familiar

Fred empezó a abrir sus ojos con una notable dificultad, estaba exhausto y se sentía al limite de sus fuerzas, a pesar de ello, podía sentir claramente como era cargado entre dos personas, uno de ellos le tomaba de los hombros mientras el otro le tomaba las piernas, una posición típica para cargar a alguna persona que no pudiese caminar del todo, miro hacia una de las personas que lo cargaba aun con sus ojos entrecerrados, abrió su boca para hablar siendo interrumpido por una tos seca. Los otros se detuvieron al notar que había empezado a despertar:

—¡Pá! —gritó el que le sostenía de los brazos—. ¡Ya despertó!

Lo dejaron en el suelo con delicadeza y al poco rato un hombre se acercó a la escena, observaba a Fred mientras el otro sentía como palpaba su cuerpo revisando y asegurandose de que no hubiera ningún tipo de herida, debido a que estaba dándole la espalda al sol, proyectaba una sombra que le impedía el azabache distinguir sus facciones, trataba de hablar pero tenía la boca seca, notó como le acercaban un pequeño tazón de madera con agua, con dificultad se levantó bebiendo un sorbo del tazón con la bebida que le ofrecieron, frunció el seño al notar un sabor amargo pero que llego a reavivar sus energías perdidas:

—Bebe un poco más, te ayudara.

Aunque desconociera por completo las intenciones del otro pudo percibir cierta sinceridad en su voz, bebió del tazón hasta dejarlo casi vació, sentía nuevas energías en su cuerpo, aquel té peculiar tenía un sabor amargo pero había devuelto la fuerza que el azabache había perdido, levantó la cabeza dispuesto a agradecerle cuando abrió sus ojos de par en par: el hombre que lo observaba tenía una piel clara, el pelo corto y de un color morado obscuro, sus brillantes ojos turquesas le veían con curiosidad, y se veía bastante alto, colgado de su cuello estaban los lentes de Owynn... No podía ser:

—¿S-Señor Jacob?

El mayor se sorprendió ante lo que le dijo Fred:

—Soy yo... ¿Pasa algo?

—¡E-Estabamos buscandolo! —Fred se levantó de golpe con vigor, miraba a todos lados intentando localizar a sus compañeros—. ¿Owynn?, ¿Freddy?

—¡Por aquí! —gritó una voz femenina.

Fred vio a una mujer de tez un poco más obscura que de Jacob, tenía el pelo largo y de un color castaño claro, tenía unos brillantes ojos dorados que expresaban una gran dulzura, recordaba ese rostro visto en la fotografía que le había dado su compañero hace tiempo atrás:

—Amber... —se acercó hacia ella percatandose de sus otros dos compañeros, ambos completamente inconscientes y visiblemente fatigados—. Freddy... Owynn...

—¿Conoces al pequeño Owynn?

—Es... Una larga historia. ¿Ellos dos se encuentran bien?

—Están agotados y puede que estén deshidratados, pero con los cuidados adecuados ustedes estarán en condiciones.

—¿Y que hay de ti chico? —le preguntó a Fred—. ¿Crees que podrás seguir nos el paso?

Antes de que el otro pudiese responder, fue interrumpido por un repentino mareo, empezó a tambalearse, el mayor de edad notó esto y lo atrapó antes de que terminara por caerse:

—Tranquilo, vamos, sabemos que debes de estar agotado pero no queda mucho.

—Gracias...

Murmuró a duras penas mientras se apoyaba sobre el hombro del mayores seguían su camino y tal como dijo Jacob, no estaban muy lejos de su destino, Fred miraba al frente incapaz de contener su sorpresa: Tal como había dicho Owynn, un enorme y realmente tren de colores marrones y rojizos con un techo de tonalidad más oscura les estaba esperando, Fred casi no podía creer lo que observaba, era... Fascinante, tuvieron que entrar por la zona trasera para evitar llamar la atención de todas las personas que residían allí, finalmente llegaron a la zona de las habitaciones, era un vagón grande con varias literas el mismo tenía una decoración cálida, como si invitara a sus inquilinos a recostarse en esas camas y dormir, especialmente después de haber dormido en el exterior durante tanto tiempo, esas suaves y cálidas camas parecían tan cómodas: