¡No te odio Ian!

Capítulo 44: Érick

Un año y medio después...

Uff como pasa el tiempo

Fue lo primero que dijo mamá al despertarnos ese día, nuestro cumpleaños

Por fin éramos mayores de edad

Mama cómo todos los años nos despertó con el desayuno en la cama y nos dejó faltar a la escuela, no me gustaba mucho la idea, pero acepté. Después de desayunar me duche y baje a saludar a mí familia que había ido a almorzar.

-Felices 18 hermano- le dije a Ian y entrelazó su dedito meñique con el mío

-Felices 18 hermana- respondió y le sonreí antes de que Evan llegará y nos abrazara finjiendo estar llorando.

Él sigue siendo un idiota, pero ha cambiado durante estos casi dos años. Cambio su peinado, se hizo tatuajes y perforaciones, estaba más alto y más marcado, había tenido que empezar a trabajar con los Brooklyns para que no le hicieran daño y ahora estaba mucho más fuerte, pero seguía siendo bastante delgado.

-Aléjate- dijo Ian pero Evan lo abrazo de todos modos, mí hermano también había cambiado un poco, su cabello rubio se volvió un tono más oscuro, su mandíbula se marcó más y sus ojos se volvieron más oscuros. También se puso un piercing y se tatuó el nombre de mamá y el mío, además se hizo otro de un lobo solo porque le gustó y porque seguro él, se veía más ardiente

-¡Tú tampoco te escapas!- exclamó alejándose de Ian e intente correr pero me atrapó antes y me abrazó demasiado fuerte. Intenté separarme pero solo logré que nos calleramos al piso.

-¡Evan déjame!- exclamé y empecé a golpearlo.

-¡Maxin Jamie Smith Pierce!- escuché el grito de mamá y Evan se levantó de un golpe

-Eso no sonó bien- dijo y me ayudó a pararme-¿Qué hiciste ahora Max?

-¡No hice nada!- me queje e Ian se río

-¿No recuerdas tu broma con la silla de la profesora Maite?- preguntó Ian y mí mirada cambio drásticamente.

Hace dos días la profesora física me había regañado por culpa de Dash y me castigó. Al día siguiente llegué temprano y puse pegamento a su silla. Durante la primera clase ella se mantuvo sentada todo el tiempo porque nunca se levantaba para mirar lo que hacíamos, pero cuando intento pararse cuando toco el timbre, no pudo hacerlo, le pidió ayuda a gritos para que la ayudamos, reía junto a mis amigos cuando uno de mis compañeros tiraron de sus brazos y toda su ropa se rompió y ella callo sobre los dos chicos. La profesora se levantó furiosa y nos grito mientras se tapada su cuerpo con sus manos, le quitó una campera a un chico y corriendo salió del salón y todos empezamos a reír.

Obviamente nos castigaron a Dash, Kara, Elena, a un compañero más y a mí porque todavía no sabían quien había sido y por la furia de la profesora, prefirieron castigarnos a todos.

Caminé hasta la cocina y vi a mamá hablar con una amiga, apenas me vio empecé a hablar

-¡Mamá te juro que no quise hacerlo! ¡Esa vieja me odia y tenía que vengarme!- dije y frunció el ceño

-¿De qué hablas?- dijo y abrí los ojos

-De nada- hablé rápido y rodó los ojos

-Solo quería decirte que alguien te espera afuera- dijo y fruncí el ceño. Caminé hasta la puerta y abrí la puerta.

Me quedé estática durante unos segundos y un nudo en mí garganta se instaló, sonreí y tape mí boca antes de correr a los brazos de Erick

No lo vea desde hace un año, se mudó con su familia justo cuando mí relación con él creció, se volvió mí mejor amigo y a los meses se fue, pero nunca dejamos de estar en contacto

-Te prometí que volvería- susurro a mí oído mientras nos abrazamos

-Te extrañe mucho- susurré absorbiendo mí nariz

-Y yo a ti- hablo y me separé un poco de él, no había cambiado en lo absoluto-Volviste a ser la rubia Max ¿Eh?

-Quería verme más natural- deje que mí pelo creciera y volví a ser rubia, había tiempo no lo era, pero ya que todos cambiaron, decidí volver a ser la vieja Max, la rubia Max.- Ven, vamos adentró, los demás se pondrán felices al verte

Erick me sonrió y tomo mí mano antes de comenzar a caminar adentró. Al llegar fuimos al patio y al verlo todos se tiraron encima de él para abrazarlo, terminaron en el piso aplastando a Érick.

-¡Salgan imbéciles!- exclamó él con poco aire-¡Me están matando!- todos rieron y se levantaron de a uno.

-Es bueno verte de nuevo aquí Érick- dijo Seth detrás de mí, él y yo éramos los únicos que no nos habíamos tirado sobre él, gire la cabeza para mirarlo y el me dedico otra de sus miradas de despreció

-Es bueno volver- dijo Érick y volví a mirarlo, él fruncía en ceño mirándome "Después de te cuento" formule con mis labios y volvió a sonreír.

Almorzamos ahí en mí casa, todos estaban felices y reían. Mí familia era poca, mamá, Ian, mí tío Liam y mis abuelos, el padre de papá murió cuando era pequeña por lo cual solo estaba mís dos abuelas y mí abuelo.

Yo no tenía más tíos que Liam, era el único hermano de mamá y papá era hijo único. con Ian tampoco tenemos madrina, mamá me contó que ella solo quería te tuviéramos padrino porque Kendall era en la única que confiaría a sus hijos, pero como falleció antes de saber que mamá estaba embarazada, decidió que no tendríamos una, solo están Aiden y Isaac.

Eso era mí familia, tenía más tíos y primos, pero nunca se interesaron en nosotros, así que yo no los concidero mí familia

Los que siempre están son los del barrio, todos los chicos siempre estuvieron para lo que necesitamos y los amo muchísimo.

***

Cuando todos se fueron, ayude a mamá a limpiar un poco. Ya era tarde, estaba de noche y al otro día mamá tenía que trabajar, así que la mandé a dormir y me quede sola, ya que Ian se fue con Evan a no sé dónde.

-¿Te ayudo?- escuché la voz de Erick y gire a verlo

-Creí que te habías ido- le sonreí y se acercó

-No me iría sin esa charla que me debes- dijo y empezó a enjuagar los platos con detergente.-¿Qué sucede con Seth?

-Ni siquiera yo lo sé- me encogí de hombros- Hace meses empezó a ignorarme y a mirarme mal, ya no hablamos y eso no me gusta, yo lo amo, era mí mejor amigo

-¿Qué hay de Jordán?- preguntó y suspiré. Seguimos juntos, el primer año de novios fue maravilloso, pero ahora, él viaja mucho y solo nos vemos en la escuela, ya tiene 19, pero repito un años por faltar mucho. Nuestra relación se está desgastando y casi siempre discutimos

-No muy bien- sentí que mí pecho se oprimía, Jordán es mí primer amor y me duele creer que pronto se iba a acabar- Tengo el presentimiento de que lo nuestro se va a acabar.

-¿Por qué lo dices?- hablo triste y frunció el ceño

-Ya nada es como antes, discutimos siempre y nos vemos poco. No sé cómo podemos seguir juntos así, él me va a dejar Erick, lo sé- dije con un nudo en mí garganta, Jordán ni siquiera había ido a mí casa ese día.

-No pienses así Max, deben luchar por estar juntos, se aman

-Ya lo sé. Pero todo ha cambiado y nuestra relación se está volviendo tóxica.- fue lo último que dije sobre el tema. Hablamos de muchas cosas esa noche. Extrañaba mucho a Jordán y a Seth, pero no podía hacer nada para que las cosas cambiarán.