Logrará Skyler Adams, alejar y esconder sus sentimientos y deseos por el campeón de rodeo Scott, pero además evitar grandes desafíos como sus problemático ex-novio y a sus dos hermanos mayores amigos de Scott , que harán lo imposible para mantener...
Mucho gusto Skyler, tu hermano me ha hablado mucho sobre ti.- dijo tendiéndome su mano. Después de quedarme ida por unos momentos y parecer estupida, decidí estrechársela, pero valla grandísimo error que cometí, ya que al juntar nuestras manos, sentí algo inexplicable, mi estómago parecía tener un circo completo y no pude evitar sonrojarme. Al parecer el se dio cuenta de mi estado, ya que esboso una pequeña sonrisa burlona.
Mhhmmm.- le carraspeó de mis hermanos, nos hizo desconectar de nuestra batalla de miradas y darnos cuenta que aún seguíamos sosteniendo nuestras manos. Rápidamente las solté y mis hermanos veían la escena con el ceño fruncido.
Scott, amigo ¿porque no te quedas a cenar y recordamos viejos tiempos?.- maldije internamente, gracias James por tu magnifica idea, ahora no podría siquiera levantar la cabeza sin evitar sonrojarme, y podría apostar que durante la cena sería peor.
Mmmm.... no me gustaría incomodar.- dijo viéndome, demonios creo que fui demasiado
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Pfffff, amigo tú eres recibido en nuestra casa, no como el estupido novio imbecil de nuestra hermana.- dijo Collin viéndome fijamente, a lo que yo me dediqué a rodar mis ojos.
Enserio Collin? Cuando van a parar con ese tema? Estoy harta de ustedes y como juzgan a Alex sin siquiera darse la oportunidad de conocerlo.- dije más que enojada, ya que siempre era lo mismo.
Así que me di media vuelta y comencé a caminar hacia la casa, sin ánimos de seguí escuchando ofensas hacia mi novio. Al entrar vi a mi madre y a mi padre abrazados mientras bailaban una canción de country muy romántica; se veían absolutamente tiernos, y yo esperaba tener una relación como la de mis padres.
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Cuando terminaron no pude evitar aplaudir y sonreírles, mi madre se sonrojó y se escondió en los brazos de mi padre, mientras él la apretaba y juntaba más, mientras me sonreía con cariño. Ven aquí pequeña.- no lo dudé ni dos segundos y fui a ellos mi padre con su brazo libre me abrazo y beso mi frente.
En eso entraron mis hermanos, me dedicaron una pequeña sonrisa a modo de disculpas, pero iban a necesitar más que una sonrisa para que los perdonara. Pero recordé a su amigo y no pude evitar voltear a mirarlo, encontrándome con la sorpresa que él hacía lo mismo conmigo, nuestras miradas volvieron a chocar y si las malditas mariposas volvieron a volar en mi. Sinceramente no se que me está pasando, bueno más bien si lo sé, pero me aterra, pensar en sentir algo por otro hombre que no sea Alexander, siento que lo estoy traicionando.
Decidí terminar con nuestra conexión y pase al comedor donde ya se encontraba la mesa servida, todos tomamos asiento. Papá en la cabecera y mamá a su derecha, mientras que James enfrente de mamá, por lo que Collin estaba en la otra punta de la mesa, y adivinen Scott estaba frente a mi. Algo me decía que me esperaba una muy larga noche.
Después de mucho tiempo de sufrimiento para mi, ya que Scott en varias veces me encontró viéndolo. Decidí que era hora de levantarme, pero al hacerlo mi celular, sonó con la llegada de un mensaje. El contenido me dejo un poco confundida.
— tu novio, no es el príncipe que piensas que es—.
