¡Bienvenido al Campamento Mestizo! (Rayito) (Gay) (yaoi)

Duodécimo Capítulo

El sol está por ponerse y en la cabaña de Hades reina un silencio incómodo. Percy, Annabeth, e incluso Piper se han marchado harán ya diez minutos, y solo habéis quedado un puñado de semidioses que no saben hacer nada más que mirar de un lado al otro, todos nerviosos, a excepción de Marie, que parece imposible de inmutar. Le habéis explicado todo lo que sabéis, incluyendo el dichoso hotel del que Hades había hablado. Pero nada. La chica era de piedra.

-Ya es hora-anuncia Leo- Nico, por favor...

-¡La profecía fue muy clara! ¡Miguel no puede venir!

-Te he dicho que la profecía no habla de Miguel - Intervienes, con voz suave para tranquilizar a Nico- Mi instinto me lo dice.

-Que le den a tu instinto, ¡es demasiado peligroso!

Te conmueve un poco. Sabes que Leo le tiene un poco de miedo a Nico y ni Marie ni Aaron parecen muy contentos con tu querido enano gruñón. Aún así, a Nico parece horrorizare la idea de que alguien sufra.

Abandonar a Miguel no es opción, de cualquier forma. Tu corazón te grita que debes llevarlo. Y no solo porque sea tu amigo de toda la vida, sino porque sabes, de una u otra forma, que lo vas a necesitar.

-Nico, Nico di Angelo, hijo de Hades- Dices- Cuando te apareciste en mi sueño, ¿te creí?

-Sí, pero....

-Calla. Cuando tú y Leo, bueno, sobre todo Leo, me dijeron que era un semidiós, ¿os creí?

-La verdad es que yo...

-¡Calla! Como sea, al grano. ¿No crees que es tu turno?

Nico rueda los ojos, tomando la mano de Miguel y la de Marie.

-Agárrense bien- Os avisa- Marea un poco.

¿Un poco?

Un poco tus bolas.

No era tu primera vez, así que actuaste rápido, tomando a Miguel y a Leo con fuerza de la mano. Aún así, eso no te salvó de nada cuando la oscuridad te rodeó, en frenético movimiento. De u momento a otro, estás en un oscuro bosque, estrujando con fuerza las manos de Leo y Miguel. Woopsie. Te sueltas a toda prisa, hasta que escuchas un ruido raro y te lanzas sobre la espalda de Miguel.

-¡Ay, Miguel!- Chillas- ¿Qué fue eso?

-Podría ser cualquier cosa- Responde Marie, ignorando que la pregunta no iba hacia ella- Tenemos que salir de aquí. Nico, ¿Por qué no nos has llevado más lejos?

-T/N... T/N lleva mal esto, no sé si le viene bien, ayer tuvo fiebre muy alta.  Es el único hijo de Apolo del grupo, si alguien resulta herido lo vamos a necesitar.

-Yo podría cuidar de él- Refunfuña Marie, fulminando con al mirada a Nico- Además, Hades te dio la dirección, solo estamos perdiendo tiempo.

-Tú solo quieres tirarte a T/N, seamos sinceros- Opone Miguel, con sus pocos escrúpulos- Y Nico debe estar agotado.

-No, estoy bien- Se defiende Nico- El hotel está muy cerca, sería fácil para mí llegar. Es solo... Estos viajes no son tontería, ¿sabes? Podríais acabar disueltos en la misma esencia de la sombra. Toda vuestra estructura ósea y muscular... Se desharía poco a poco, como el pan en el agua. Tal vez ustedes puedan soportar eso, la distancia ha sido corta y estáis bien entrenados. Pero no creo que T/N lo pueda resistir en su condición.