Capítulo 3

15K 1.5K 119
                                    

Cuando el sol quiso salir ya JiMin se encontraba despierto, pero muerto de sueño. JungKook lo había traído hace apenas un rato, ya que luego de su encuentro ambos se quedaron acostados hablando, recordándole a JiMin lo mucho que disfrutaba de hablar con JungKook como amigo, como hacía mucho no lo hacían, como si fueran dos amigos de todas la vida, porque es lo que eran.

JiMin se sentó en la cama y pasó su mano por su cabello, estaba listo para ir a universidad. Pero había un pequeño inconveniente, se le acabaron los supresores y hasta el mismo percibía el olor de JungKook en su cama y eso que el pelinegro no había dormido ahí. ¡Era él! Apestaba a JungKook por todos lados.

Apretó los dientes, y se maldijo a sus adentros por ser tan descuidado y haber olvidado comprar nuevas dosis, no quería salir y que sus madres le dieran el sermón del año. Ya sé imaginaba lo que dirían, más que todo su madre alfa, ella es muy sobre protectora y podría castigarlo si supiera que se iba a revolcarse con un alfa a escondidas. Se estaba comiendo las uñas pensando en cómo haría para bajar a desayunar y que su madre no lo matara. El sonido del conocido motor se oyó afuera y asomándose por la ventana vio el carro de su madre irse por la carretera. Se levantó de un brinco casi feliz, con un suspiro de alivio salió de su habitación en dirección de la cocina. 

Estaba echando leche al cereal cuando fue tomado desprevenido

—JiMin?—su omma se le acercó, todo su cuerpo se tensó, se dio vuelta y vio a su madre omega de pie con los brazos cruzados, el pequeño lobo le dio una sonrisa tensa.

—Mamaaaa... ¿no estabas con mi madre?—La omega lo miró con una ceja alzada y se acercó más hasta su cuello, oliendo ahí.

—¿Me lo vas a decir?— Lo miró impasible. 

No tuvo que hacer una pregunta directa para saber a lo que se refería.

—Es un alfa.—comenzó de manera suave. Su madre se sentó y señaló el asiento que estaba frente a ella, JiMin se sentó y siguió hablando, pero sin mirarla, el rugor pintaba sus mejillas. JiMin necesitaba sacar esa información de él, el confiaba más que nada en su madre omega, ella siempre había sido comprensiva con él y esta vez sentí que mentirle sería como traicionar todas esa confianza depositada. —Mi omega lo reconoció como mi alfa, pero el a mi no. No sé en qué momento nuestra relación de "amigos"—hizo comillas con sus dedos. —Se volvió en encuentros... -- Apretó los labios en una línea sin querer decir la palabra, no quería y temía que su madre pensara en el cómo un omega cualquiera. Sus ojos picaron y sintió un nudo hacerse en su garganta.

—JiMin.—Su tono fue amoroso, y el joven sintió pequeñas lagrimas cayendo de sus ojos, no merecía a su madre, ella es el ser más amoroso y comprensivo de la vida. Su madre tomó su mano por encima de la mesa. —Yo sé lo que duele no ser reconocida por tu alfa. Con tu madre me pasó lo mismo y fue horrible, pero ante todo tu eres mi hijo. —Asintió sin saber que decir. Sentía que se estaba hundiendo en un amor unilateral por Jungkook, pero se negaba, no quería apartarse de él. Su madre al ver el llanto aproximarse se colocó de pie y abrazó a su hijo, mientras acariciaba su cabello con cariño. 

—Y-yo lo amo, ma, pero no soy correspondido. -- Sollozó, mientras se permitía después de mucho tiempo liberarse de ese secreto. Bajo la cabeza con tristeza.

—Eso lo sabremos, yo te ayudaré a cortejar a tu alfa. —Levantó la cabeza con un brillo en los ojos que a su madre le dio ternura, limpiando las lágrimas de su rostro le apretó los cachetes con cariño.  —Pero JiMin, si yo veo que esa relación va a ser tóxica, no dudare en separarte de ese alfa, aunque te tenga que mandar lejos de aquí, no quiero verte como te estoy viendo hoy. Nuevamente lloró de tristeza, de alegría, por su amor no correspondido, por su madre, sintió una mezcla de distintos sentir.

Controlando mi omega《KookMin》OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora