Capítulo 9

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Unos pasos se escuchan y a lo lejos distingo a Ed quien corriendo se acerca a S, éste lo saluda y se hablan por un buen tiempo, cuando terminan Ed se acerca a donde estamos y nos saluda a todos, después de eso no dice más.

¿Qué esperaba?, pues que se disculpara por cancelarme, pero no, solo me saludo y ya. No es que me enoje, solo que, no sé, diría un “tuve otros asuntos, perdona”.

Pasan unas horas y S por fin se acerca a donde estamos reunidos, mira a Ed y le afirma algo, ¿qué le afirmará?, no lo sé y espero poder averiguarlo.

— espero que no se olviden de como hablar con los invitados — les habla S.

Todos afirmaron. S me miro divertido y se me acerco para decirme algo sin que los demás escucharan.

— espero que te diviertas y recuerdes algo, Liriam.

Todo lo dijo tan despacio, tan tranquilo que realmente no lo procesé hasta que se alejo y con una sonrisa comenzó a dar ordenes a los chicos.

Mi cabeza es todo un lío, ¿Cómo sabe mi nombre?, ¿me conoce desde antes?, ¿quién será?, ¿quiere qué lo recuerde?. Quiero saber todo lo que él sabe, pero no me será fácil, sé que de alguna forma él sabe más de mí, que yo misma.

Estuve horas y horas pensando, tratando de recordar donde pude haber conocido a semejante persona que con solo caminar demuestra lo autoritario que es, con sólo mirarte te congela completamente, con solo pronunciar algo hace que no puedas ni responderle, con solo estar a tu lado hace que te veas como una minúscula persona, ese es S, un chico completamente misterioso que a simple vista se sabe que contiene secretos.

No creó haber conocido a semejante ser, no recuerdo.

— ven — sacandome de mis pensamientos, S me acerca y termino apegada él por lo imprevisto que me tiró — debes de estar a mi lado, pronto llegarán los invitados.

— ¿he? — ¿ya es la hora?, maldición, lo que me dijo me dejó en las nubes.

— si te dicen “es un gusto volver a verte”, simplemente ignoralos, son viejotes que confunden a todo el mundo.

— esta bien.

Cuando comenzaron a llegar los invitados, muchos hicieron lo que S me había dicho, me preguntaban incluso como estaba de mi accidente, de verdad que la edad les afecta.

Lo raro es que todos me decían M y S jamás me presentó ante ellos.

— tan hermosa como siempre, M — un joven bien arreglado y con ojos azul marino me evaluaban de arriba a abajo — veo que el accidente no provocó grandes heridas.

— sí, por suerte — le seguí el juego.

¿Me conoce?, esta bien que los otros me hayan dicho eso porque como dijo S, eran viejotes, pero…¿y él?

— y S, siempre dando una fiesta espectacular, dime, ¿a quién acorralaras en ésta fiesta?.

— ya no seria divertido si se lo digo.

— tú y tus sorpresas, espero que me entretengas como siempre, S — mira a su alrededor — mientras tanto disfrutaré la invitación — se despide de S — espero hablar más contigo, M, como en los viejos tiempos.

No le respondo y él se marcha acercándose a un grupo de señores que deben de estar hablando de trabajo.

No tengo ni tiempo de preguntarle que ha sido eso cuando llegan más invitados.

Cuando por fin ya no hay más invitados puedo saciar mis dudas o eso creó.

— señores y señoras, es un gusto tenerlos presente, pronto comenzará la función, espero que les guste — habla S a todos los presentes mediante un micrófono, al terminar se acerca otra vez a mi, demasiado y me dice en un susurro.

— ya lo sabes, ¿no?, nuestro verdadero trabajo, el verdadero culpable — asiento con la cabeza — te daré el honor de decirlo, Liri — y se endereza.

— pero y si…

— ¿te equivocas?, no te preocupes, siempre ganas, ¿no?, esto es lo mismo que un juego, no hay forma en que te puedas equivocar, nunca lo haces.

Estaba a punto de preguntarle, de decirle todas mis dudas, cuando una música comenzó a sonar llamando la atención de todos los presentes.

— ya esta comenzando — toda la expresión de S demostraba diversión.

Era una obra, se relataba la historia de un estafador, asesino, empresario y todo lo que hizo hasta ahora. Mientras todos estaban atentos los  meseros sin hacer ruido cerraron todas las salidas posibles.

Cuando término la canción la obra igual y todos aplaudieron. S por otro lado me llevo arriba de un pequeño escenario donde antes los actores estaban relatando la obra y sonriente miro al público.

— espero que les haya encantado todo esto, pero lamentablemente tendré que terminar la fiesta para un invitado, quién es el protagonista de la obra antes vista — me mira y sonríe — mi compañera les dirá su nombre.

Me entrega el micrófono y todos me miran expectante o como yo lo digo, con cara de bobos.

— Thomas Montés — digo mirando entre la multitud — ¿podría subir y entregarse?

S se río ante mi pregunta y le hizo señas a los del grupo quienes de un momento a otro atraparon al culpable quién intentaba escapar.

— me gustaba a la Liri de antes, pero me encanta la Liri de ahora — me dice mientras un alboroto se genera entre los invitados.

— ¿Cómo es qué...?

— el tiempo resuelve todo — me acaricia la cabeza — me pregunto si podrá resolver tu vida — se ríe — o tus dudas.

Y ya, se va sin más, dejandome arriba, con muchas más dudas que antes.

Lo demás de la fiesta fue como cualquier otra, lo único anormal fue lo que sucedió antes, pero ya todos estaban disfrutando de la fiesta después de que se llevaran al culpable preso.

Cuando se fue el último invitado, todos los del grupo se reunieron.

— ¡eso fue increíble M! — dice L

— de seguro S le dijo todo — habla I.

— lo no hice — niega S — descubrió todo sola.

— eres muy buena en esto, M — habla Ben con su típica sonrisa.

Ed por otro lado…

Oscura realidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora