Hay días buenos y días malos.
Pero por alguna extraña razón a mí solo me tocan puros días malos; cada día es más imposible para mí, ya no puedo soportar tanto dolor...
Mi fortaleza se está debilitando y se me hace difícil poder contener el diluvio que se aproxima a mis ojos ¿Qué hice para merecer esto?
Solo soy un desperdicio de este mundo, una basura, algo que no aporta nada aquí, soy un ser inútil.
Aquí dentro siempre llueve.
Y jamás se detendrá el agua que cae en picado.
Me matará poco a poco pues de la pequeña isla perdida en donde hermosos árboles y frutos llenos de color y vida yacían, solo queda el mar que inundó todo a su paso, sin dejar rastro alguno de la hermosa y pequeña isla.Y nadie vino.